|
Fundado
el 9 julio de 1948
Por Rafael Cano Giraldo
-1948-1982
Director: Zahur K.
Zapata - 1982 –
ADMINISTRACIÓN
Publisher
Zahur
Klemath Zapata
Gerente
Operativo
Raphael
Klemath
REDACCIÓN
Jefe de Redacción
Rubén
Dario Varela Hurtado
Colalaboradores
Gustavo Alvarez Gardeazábal
Harold Alvarado Tenorio
Gabriel Jaime Caro (Gajaka)
Luis Alberto Figueroa
Rafaerl
Urrea
Marketing
Director Comercial:
John
González González
Diagramación
Rafael
Zardar
Roberto Gonzalez
Soporte Tecnológico
Aurooj Ali Khan
Muhammad Mushtaq
CONTACTO
E-mail:
director@elimparcial.com.co
redaccion@elimparcial.com.co
ventas@elimparcial.com.co
Calle. 21
Nº
7-68 Segundo Piso
Tel. (57)
6 348-6207
Pereira, Colombia
Directora: Alejandra
Valencia Zapata
Colaboradores:
Gustavo
Álvarez Gardeazábal
Harold Alvarado
Tenorio
Zahur
Klemath Zapata
Gabriel
Jaime Caro (Gajaka)
Carlos
Orlando Pardo
Jota
Mario
-------------
correo@magazinliterario.com
El Imparcial es un
medio informativo digital
que se
publica
en
PF en
Internet y pertenece a
la red de medios "Network
Digital News" de
propiedad de ZahurK. |
|
LA CORRUPCIÓN ES UN MAL SOCIAL
El
Estado o el establecimiento son las fuentes de donde nace la
corrupción. Esto parece un poco extraño sí se aprecia desde el
ángulo político.
La democracia es la fuente del poder político que los ciudadanos le
dan cuando hacen campaña para ser elegidos a puestos públicos en el
establecimiento.
Y para esa elección se hace todo tipo de transacciones y componendas
que les permita llegar a la curul que se pretende alcanzar. La
corrupción como tal comienza a gestarse allí porque es donde nacen
los acuerdos políticos que deberán cumplirse en un futuro.
Todos aquellos que hacen parte o está involucrados en esa campaña
hacen parte de la corrupción ya sea inocentemente o porque
participan.
El segundo paso es que cuando ya están posesionados en sus cargos
comienza el carrusel de intercambio de favores y dineros.
La sociedad se ve involucrada porque ella ha elegido al personaje
quien a su vez será su verdugo al imponer impuestos que les permite
invertirlos en programas que a su vez les dá una utilidad económica
que les permite permanecer en el poder. Pero las cosas no se quedan
ahí porque el ciudadano comienza a lidiar con el sistema en todo
tipo de transacciones que el mismo Estado establece.
Todos sabemos que negociar con el Estado es muy complicado por toda
la trama que existe dentro de sus leyes y obligaciones que le crean
al ciudadano.
Aquí es donde nace la corrupción y se va extendiendo por todos los
rincones amparada por los mismos ciudadanos que callan, participan o
se hacen los desentendidos de lo que pasa en su entorno.
El país no va a cambiar si la idiosincrasia de la corrupción no se
le tuerce el pescuezo. Y para que eso suceda hay que establecer unos
parámetros a seguir que todos puedan asimilar y se dé el cambie que
todos espera que se dé.
Es muy difícil que una sociedad cambie de un día a otro si ella no
se reúne a marcar la ruta a seguir apartados de los políticos. Si
ellos están como parte de ese cambio no habrá porque ellos no
quieren que se dé ese cambio. |
|
NADIE INVIERTE EN
POLÍTICA PARA PERDER Y MENOS DESPUÉS DE GANAR
Gustavo Pérez
González
Jamás podremos combatir la corrupción que nos azota hoy con
inclemencia, si los Partidos Políticos acreditados para dar los
avales a sus candidatos de cara al próximo debate electoral, siguen
sometiendo a los postulados a tener que venderle el alma al diablo,
buscando a los ya bien reconocidos padrinos políticos de siempre
para que les financien económicamente sus campañas, para poder
elegirse, a cambio de comprometer anticipadamente cada una de las
más importantes dependencias de su futura administración. Una vez
elegidos, cada Secretaría de Despacho, cada Instituto, cada cargo de
importancia, ha sido negociado con antelación; perdiéndose el
control administrativo directo de cada dependencia en particular, en
manos de quienes aportaron los recursos para cada campaña, dando
vida a semejante corrupción, propia de la falta de autonomía plena
de quien solo reduce su función pública a nombrar a los señalados y
a callar sobre su desempeño sin poder chistar.
Cada despacho tiene dueño conocido desde antes de elegirse al que ha
de gobernar. Todo por la irresponsabilidad ética y moral de los
Partidos Políticos, que no asumen los costos de las campañas para
que los dineros oscuros no causen tanto daño.
Cada Partido Político es responsable de semejante arbitrariedad y
claro, nada podemos reclamar.
Es decir: tenemos que elegir desde la decencia pública gobernantes
que puedan ejercer sus cargos, lejos de presiones intimidantes y
peligrosas que los obliguen a firmar lo que no pueden firmar. Hay
que cortar de raíz el indigno estribillo de cajón, “firme hp que yo
puse el dinero para que usted esté sentado ahí”
Tienen la palabra los Partidos Políticos acreditados, hoy tan
comprometidos en acabar la corrupción, si es que de verdad quieren
contribuir a sanear la Administración Pública de tanta maldad.
|
|
REVELADOR
Gustavo Álvarez Gardeazábal
Las actitudes públicas, mucho más que las privadas, son las que
ayudan a los ciudadanos a conformar una idea de sus gobernantes. Es
lo que sucedió la semana anterior cuando el señor presidente Duque
convocó a la Casa de Huéspedes de Cartagena a los tres candidatos
presentados por el partido conservador, para que dé entre ellos,
nombre el enésimo alcalde de Cartagena y trate de terminar el tantas
veces interrumpido período de los burgomaestres de esa ciudad,
querida por todos los colombianos.
En una sala donde el presidente estaba sentado en poltrona,
acomodaban igualmente en otra al candidato que respondería 20
preguntas hechas de antemano e idénticas para cada uno de ellos. A
la derecha del presidente Duque estaba sentado el par de delegados
de las dos veedurías aceptadas en Cartagena y al otro lado el
presidente del partido conservador, el exsenador Hernán Andrade.
Todos como testigos áticos, aunque los de las veedurías expidieron
comunicado público con posterioridad. En frente los fotógrafos y
camarógrafos. Todas las preguntas y todas las respuestas fueron
hechas ante el auditorio en pleno mientras el presidente tomaba
apuntes en una libretica.
Para muchos se trató de un espectáculo de la trasparencia que el
nuevo gobierno quiere imponerle a sus actos. Para otros de la
representación engañabobos de un gobernante que a falta de criterios
se escuda en la meritocracia. Para quienes somos mal pensados, de
una lavada de manos al estilo Pilatos para quitarse toda
responsabilidad en la escogencia de quien gobierne a una ciudad en
donde presidente, políticos y ciudadanos se han equivocado
garrafalmente hasta dejarla en la triste situación de hoy dia y
funcionando por inercia.
|
|