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Pereira, Colombia -Edición: 12.881 - 461 Fecha: Martes 08 - 02 -2022 |
COLUMNISTA |
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La hora de la verdad
Por: Luís Enrique Arango
Cualquiera de estos cinco puede ser :
Sergio Fajardo Valderrama
Cruzo mis dedos con la certeza de estar haciéndolo como corresponde !
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Presente Cultural
Por: Edgar Cabezas
Treinta y un años después que el constituyente reconociera la diversidad étnica y cultural de la Nación ,cabe demandar al electorado que vote por la conformación de un gobierno para Colombia plurinacional, multicultural y de género de la diversidad sexual que garantice la concordia de las mujeres, los hombres y los no binarios al interior de las distintas familias y su interrelación con la comunidad vecina y la sociedad nacional para que el maltrato generado por la violencia acompañado con segregación y discriminación por lo diferente abandone su repetitiva neurosis y angustia subjetiva de castigo.
La pertenencia a una etnia es la posesión real de las mismas disposiciones heredadas y trasmisibles por herencia y que descansan en un origen común. La cultura de la vida consiste en el acercamiento y aprecio por las etnias que presentan caracteres externos distintos y respeto a quienes por sus hábitos exteriores son heterogéneos; atracción racial subjetiva por todas las etnias y géneros en igualdad de prestigio social y admitidas en igualdad de derechos políticos y territoriales para establecer la conciencia de comunidad nacional y sentar las bases de una comunicación horizontal en la que se supriman las cadenas de dominación y se restablezca el honor y la dignidad que les despojaron.
En tanto que la cultura es un patrimonio de información de saberes, saber-hacer-actuar con base en reglas y normas propias materiales o espirituales que se transmiten socialmente en los numerosos tipos de culturas, cada una con su particularidad y cuya finalidad ideal es el perfeccionamiento y refinamiento intelectual personal con la acumulación de información y asimilación de experiencias que conduzcan a la felicidad individual y social.
La cultura centra sus esfuerzos en amortiguar las fuentes del sufrimiento humano causados por la supremacía de las fuerzas de la naturaleza, la caducidad y enfermedad del cuerpo y la insuficiencia de los métodos para regular las relaciones humanas en la familia, el Estado y la sociedad. Nuestro organismo perecedero y limitado ahora comprende la importancia de adaptación y rendimiento de su trabajo colectivo para trabajar con todos por el bienestar de todos. La evolución cultural se define como la lucha de la especie humana por la vida.
La vida y la muerte en la espiral de la virtud y el vicio nos recuerdan la innata inclinación de la humanidad hacia el mal. El hombre nace malo por naturaleza agresiva y la cultura lo reprime para que aprenda a amar al prójimo tanto como el prójimo lo ama e intenta ponerlo al servicio de la protección de la humanidad para que la belleza, la limpieza y el orden sean de mayor utilidad en el aprovechamiento y mitigación de la aberrante explotación de los recursos naturales.
Los violentos de Colombia tienen que superar el placer narcisista del sadismo que le ofrece al yo la realización de sus más arcaicos deseos de poderío, éxito y riqueza mediante la explotación del trabajo sin plena retribución, el abuso sexual, el apoderamiento de los bienes ajenos, la humillación, la tortura y el asesinato entre quienes recíprocamente se consideran enemigos históricos a muerte
El primer requisito cultural es el de la justicia, o sea, la seguridad de que el orden jurídico, una vez establecido, ya no sea violado a favor de un individuo. Hay que votar por listas paritarias y de género para abandonar el narcisismo de las pequeñas diferencias que prometen el tibio bienestar.
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Políticas públicas, transparencia y corrupción
Por: Guillermo Navarrete Hernández
Sé lo
suficientemente claro como para que pueda demostrarse que estás
equivocado. A diferencia del “sentido común”, la ciencia está
diseñada para ser una búsqueda autoconsciente del error y, por
lo tanto, autocorregirse Políticas públicas es un término que se ha acuñado en el ámbito de lo público, especialmente por quienes aspiran a ocupar una curul o un cargo dentro de la estructura estatal, sin embargo, es importante anotar que cualquier decisión o propuesta inserta en un discurso político no corresponde al ámbito de las políticas públicas, aunque tampoco puede desconocerse que pueden ser un insumo o el inicio en el trasegar de estas.
Con el presente no pretendo dejar sentado un desarrollo teórico- técnico de tales vocablos, pero sí determinar sus alcances básicos, entre los cuales se encuentran: la sistematicidad que implica un proceso riguroso en la identificación de un problema o necesidad, así como del diseño, ejecución, seguimiento y evaluación de las alternativas de solución; la imprescindible participación ciudadana en todos sus procesos; el largo aliento en su implementación con lo que supera la temporalidad de los gobiernos dada por la institucionalidad y, por ende, la transformación efectiva y positiva de entornos. Todo lo aquí anotado también concita el compromiso de establecer mecanismos de transparencia en todas las etapas mencionadas. En tal sentido, la comunicación efectiva es un elemento sustancial de transparencia en lo público y que debe estar siempre presente, no sólo para que la ciudadanía conozca y discierna cada uno de los aspectos de la respectiva política pública, sino de la posibilidad de incidir en las decisiones que en el marco de esta se puedan adoptar, en un proceso deliberatorio y negocial en el que el gana-gana societal –incluye lo económico y político-, sea la premisa que debe reinar.
No obstante, la comunicación se ha convertido en un instrumento de propaganda a favor de los intereses del administrador de turno sin que se puedan develar las debilidades, desviaciones o nuevas realidades que impone el discurrir de lo público. La foto o el video de ocasión, la presentación estadística de algunos avances conforme a la visión de los asesores de imagen o la rendición de cuentas convertida en un monologo del gobierno sin permisibilidad de crítica, la que se considera un ataque, más que un aporte para la construcción colectiva de escenarios ciertos de re-evolución.
Decisiones, acciones, presupuestos, resultados, cifras y datos abiertos, que para estos propósitos deben ser publicados de manera periódica en las páginas Web de las entidades púbicas, están lejos de convertirse en una realidad a pesar de que es una obligación impuesta por las leyes anticorrupción, de transparencia y de participación ciudadana, entre otras, además de ser una exigencia de organismos multilaterales como la ONU, el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo [OCDE].
Una de las razones por las que la rampante corrupción hace metástasis en el Estado Colombiano, es precisamente el deficiente proceso comunicacional transparente, con el cual el control ciudadano pueda tener el suficiente soporte para lograr cambios verdaderamente tangibles. |
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