Fundado el 18 julio de 1948

Por Rafael Cano Giraldo -1948-1981

Publisher: Zahur K. Zapata - 1981 –

 

 

 

Las opiniones expresadas por los columnista son de su exclusiva responsabilidad y no comprometen el pensamiento de El Imparcial

 
 

Pereira, Colombia - Edición: 12.938-518

Fecha: Jueves 8-06-2022

 

EDITORIAL

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EDITORIAL

 

 

Que nos expliquen el alza de los servicios públicos
 


Con mucho enojo y sorpresa reciben hoy en día muchos pereiranos las novedades reflejadas en su factura de servicios públicos, especialmente la factura de energía que se ha incrementado de una manera exorbitante, reflejando un aumento entre el 10 y el 15% de la tarifa que se pagaba.


Dicho aumento ha sido mucho más evidente en los sectores de estrato 4 que por cierto están siendo estratificados de una manera errónea ya que muchas familias de procedencia humilde residen en estos sectores, lo que lleva a concluir que la estratificación no debe de darse de manera colectiva, sino más bien de manera individual, apelando así a la idea que los estratos sociales no deben de existir en Colombia.

Lo preocupante de esta situación de aumento indiscriminado en la factura de servicios públicos tiene que ver con el hecho que estas entidades no cuentan con una respuesta clara a los usuarios que les explique las razones por las cuales se están evidenciando estos incrementos tan desproporcionados en la facturación.

Sigue siendo aún más preocupante el hecho que los canales de atención al cliente facilitados por estas entidades son ahora virtuales sin que las personas cuenten con la posibilidad de poder quejarse de manera directa o presencial ante un administrativo y obstaculizando de esta manera contar con la oportunidad que le brinden solución directa a su queja.

Mucho se ha hablado y rumorado que desde el gobierno local se está usando este medio de los servicios públicos para recaudar dinero que es usado en las reparaciones del sistema masivo de la ciudad de Pereira, un hecho que deja mucho que pensar ante la transparencia del recaudo de los recursos de impuestos de servicios públicos pagados por todos los pereiranos.

La ciudadanía tiene derecho a que se realice una auditoria constante y eficiente acerca de los incrementos de nuestros servicios públicos, no es justo que la gente se vea en la obligación de pagar más dinero de lo que usualmente paga por el consumo de energía y agua.

Ahora bien, otra de las quejas más recurrentes tiene que ver con el hecho que en los últimos días se han presentado casos en donde se está vulnerando el derecho a la protección de la ley del mínimo vital de agua, teniendo en cuenta que a muchas personas les están cortando el servicio de agua, pese a la ley que se hizo en pandemia que indicaba que no se podía suspender el servicio de agua por tratarse de un servicio de necesidad básica para la supervivencia.

Lo único cierto es que este tipo de alzas no pueden seguir ocurriendo sin que nada suceda, es hora de que todos los ciudadanos alcemos la voz para evitar que nos sigan vulnerando los derechos y tengamos que pagar más impuestos y mucho menos sin saber a ciencia cierta los conceptos por los cuales se están justificando este tipo de incrementos abusivos y descarados en las facturas de servicios públicos.

 

 

 

 

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Las sociedades se renuevan después de hechos traumáticos

 

 


Por Zahur Klemath Zapata
zkz@zahurk.com


Esta es la edición 12.938-518 de El Imparcial de hoy martes 21 de junio de 2022.

Lo de este domingo 19 de junio 2022 en Colombia fue un hecho que se veía venir. Es traumático para la gran mayoría de la sociedad, porque es un país de millones de habitantes y compuesto de una variedad de etnias. Esta no es una sociedad representada por un grupo. Es la conjugación de la mezcla y la remezcla de múltiples emigrantes.

Pretender que aquí se iba a mantener el dominio por quienes por siglos gobernaron y se sienten dueños de una tierra y un espíritu que ha estado mancillado por siglos es pensar como un necio que aquí nada iba a pasar.

Este más de millón de kilómetros cuadrados donde alberga unos cuarenta millones de seres que sobreviven en una de las tierras más privilegiadas del planeta comenzó su jornada de un nuevo horizonte.

No será fácil lo que viene ahora, porque los cambios serán como cuando el campesino comienza a preparar la tierra para una nueva siembra. Tiene que quedar limpio el terreno si no se perderá la cosecha. Y aquí en este panorama no va ser fácil porque hay de todos los enemigos que buscarán crear el caos, o que los mismos que piensan hacer el cambio no tengan la habilidad para realmente dirigir el país por el camino del desarrollo industrial, tecnológico, educativo y bienestar equitativo para quienes los eligieron.

Si estas cosas no se dan, no habrá marcha atrás. Vendrán otras fuerzas dentro de la lucha de poderes a competir o a restablecer no el orden sino a darle una dirección al país de unidad que es lo que viene buscando desde hace siglos.

Estos primeros meses serán cruciales y será una experiencia que se vivió en los años cincuenta con el general Gustavo Rojas Pinilla. Y aquí no vendrá un Frente Nacional a negociar con los mismos que les quitaron el poder, sino con una generación educada e informada que está preparada para dar el cambio que realmente se necesita.

Las historias se repiten, al igual que cuando se lee la Biblia, y ella ha servido de guía para creyentes a través de siglos como las profecías de Nostradamus.

Aquí se está viviendo una realidad que no está escrita, pero sí vivida por cientos de miles de colombianos que han sufrido todo tipo de vejaciones y crímenes que siguen vivos en sus sentimientos y que no hay el perdón sentimental aunque se perdone legalmente.

El siete de agosto será el comienzo de una nueva jornada en la vida de los colombianos.

 

   

Crónica de Gardeazábal # 437


GANÓ EL CAMBIO PERO NO CAMBIAMOS


Gustavo Alvarez Gardeazábal

 


Audio:
https://www.spreaker.com/episode/50263586


La elección de Gustavo Petro como presidente de Colombia es el triunfo de la opción de cambio sin violencia que él siempre predicó desde que dejó de ser guerrillero y que le fue fácil vender por la inercia de un gobierno mentiroso y equivocado como el que hizo Duque. Pero como ocurre a menudo en este país donde pasa de todo y al final no pasa nada, los 11 millones de votos que le dieron la victoria no son los que creyeron inicialmente en el cambio que pregonó desde cuando fue derrotado hace 4 años por Iván Duque.

Los 11 millones que ha obtenido en franca lid son la sumatoria de los 8.5 millones que obtuvo en la sorpresiva primera vuelta y los que le pusieron los políticos tradicionales de la corriente santista del partido liberal o los enemigos de la desgastada jefatura de César Gaviria en el liberalismo. Por supuesto, esos votos que sostienen la maquinaria de las cooperativas de contratistas que reemplazaron la verdadera esencia de los partidos políticos ni quieren ni aceptan el cambio que ilusionó al pensamiento de izquierda para cohesionarse y no seguir siendo un alacranero.

Sostener ese espíritu de cambio que ha ganado ayer será una labor muy difícil para Petro dada la mala calidad de los socios que se montaron al carro de la victoria y las rencillas siniestras que los zurdos heredaron del comunismo.

Gobernar un país tan desigual y tan fácil de desilusionarse, será más verraco todavía. Para consolidar el cambio prometido debe entonces convocarse en el menor tiempo posible una Asamblea Constituyente, que como la de Núñez en 1886, se reúna en Santa Marta o en Cartagena, no en Bogotá. Hacerla aprobar de un Congreso con las mayorías que el llamado Pacto Histórico obtuvo en marzo, es pan comido. Es previsible empero que producir desde allí el cambio verdadero para destronar a la corrupción y reestructurar las columnas que han permitido que crezca el desequilibrio social, resulte muchísimo más difícil.

Pero Petro debe intentarlo porque es solo allí, en la Constituyente, donde podrán sentarse todos a la misma mesa de la patria a sanarle las heridas, y no declarar otra maldita guerra. Así lo deben admitir tanto la recalcitrante burguesía derrotada ayer (pero no vencida) y el feroz puritanismo izquierdoso que evade sistemáticamente la racionalidad para escoger la violencia y no el diálogo y el acuerdo. Deberíamos mirar el futuro con esa óptica y desechar para siempre las estúpidas amenazas de desbaratar al país conque quisieron forzar la elección de ayer. Solo abandonando los métodos agresivos y asustadores podrá consolidarse el verdadero giro y evitar que salgamos a decir alegremente que votamos por el cambio pero no cambiamos.


El Porce, junio 20 del 2022

 

 

  

 

 

  

 

 

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