El viernes 24 de junio perdió la vida la señora Eva Mange, abuela de Laura Zapata y Thalía, a los 104 años de edad. La mujer nacida en 1918 falleció por causas naturales, y en primera instancia no fue en consecuencia directa de la presunta negligencia que sufrió hace dos años en el asilo Le Grand Senior, donde fue internada por Laura, y donde sufrió maltrato, según lo denunciado.

La primera en dar la noticia del deceso fue la villana de telenovelas, quien comunicó en un tuit: “Ya voló mi amada abuela Eva. Buen viaje de regreso a la casa del Señor, te amo y celebro tu nueva vida…” y luego, en el velorio, ante los reporteros destacó que doña Eva Mange fue “El tesoro de su vida”.

En su breve encuentro con la prensa, la antagonista de María Mercedes compartió que la señora murió en sus brazos, luego que desde el pasado jueves 22 de junio había sido llevada a un hospital al sur de la Ciudad de México por presentar alteraciones en sus signos vitales.

“Inmediatamente que decidí llevarme a mi abuela al hospital porque ya notaba un desequilibrio en su ritmo cardíaco, en su oxigenación, en todo, decidí llevármela y por supuesto que se lo comuniqué a Thalía, y por supuesto que ella estuvo en contacto conmigo”, dijo.
 

“Estoy despidiendo a mi mamá Eva, pero quiero decirles que se fue llena de amor, se fue en mis brazos, se fue en los brazos de mi hijo Patricio. Es un honor haberla despedido en este momento de trascendencia a la luz. Fue un honor para mí haber despedido a mi viejita, a mi preciosa”, añadió la actriz al borde del llanto.

Agregó que las últimas palabras que pronunció su abuela fueron “Laura Zapata” y que su deceso fue natural, pues se encontraba en una avanzada edad y su cuerpo estaba cansado, por ello es que se siente agradecida de que Mange “haya trascendido”.

“Estoy alegre por ella, porque ya dejó de sufrir. Su cuerpo estaba muy cansado porque ya le dolía, porque yo creo que los seres humanos no podemos estar así, que nos duela. Pero (…) muy orgullosa y honrada de poder estar con ella”, dijo Zapata.

Tras el velorio, este domingo 26 se celebró el funeral en el Panteón Francés de la Ciudad de México, antes de proceder a la cremación de sus restos, para cumplir el deseo de doña Eva, quien dejó claro que no quería ser enterrada “por miedo a encontrarse a solas en la oscuridad”.

Laura estuvo acompañada por su hijo Patricio y algunas personas allegadas y junto al cortejo fúnebre entonó algunas canciones favoritas de su abuela durante el trayecto hacia la capilla en donde se colocó el féretro que estaba rodeado de flores blancas.

La ausente en el funeral fue Thalía, quien un día antes dedicó a la fallecida un conmovedor mensaje en Instagram, donde mostró una sucesión de imágenes de doña Eva, desde su juventud a su avanzada