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Detienen a dos hombres que transportaban 1.000
detonadores explosivos en Caldas
En un operativo de control vial, uniformados de la seccional de Tránsito y
Transporte de Caldas lograron la incautación de 1.000 detonadores explosivos y
la captura en flagrancia de dos hombres, de 28 y 41 años de edad, que se
desplazaban en un vehículo particular por la vía La Estrella – El Palo, zona
rural del municipio de Neira.
El hecho se suscitó durante controles rutinarios llevados a cabo por la
seccional, como parte de su despliegue operacional para prevenir y controlar
actividades ilícitas en las vías del departamento. Al practicar un registro
minucioso al vehículo marca FIAT, que cubría la ruta Marmato – Manizales, los
uniformados encontraron diez cajas de cartón en el tapete derecho del pasajero,
conteniendo en su interior 1.000 detonadores (Fulminante Común #8 -45mm en
aluminio).
Los dos individuos no portaban documentación que acreditara la legalidad o
procedencia de los explosivos, ni contaban con autorización para su transporte.
La Policía está investigando la procedencia y el destino de este material, que
comúnmente se utiliza en la minería, aunque no se descarta su posible uso en
actividades delictivas o en la extracción ilícita de minerales.
La Coronel Liliana Andrea Jiménez Falla, comandante del departamento de Caldas,
afirmó que la Policía Nacional continuará con controles permanentes para
proteger la sostenibilidad del ecosistema y prevenir la explotación ilícita de
yacimientos y reservas forestales.
Es relevante señalar que transportar material explosivo de manera ilegal puede
conllevar penas de prisión de 11 a 15 años, según lo establecido en el Código
Penal Artículo 366. Los detonadores, el vehículo inmovilizado y los dos
detenidos fueron puestos a disposición de la autoridad judicial competente por
el delito de fabricación, tráfico y porte de armas, municiones y explosivos de
uso privativo de las fuerzas militares.
Capturan a tres integrantes de una red de
extorsionistas que actuaban en Risaralda y Tolima
Con la captura de dos mujeres de 28 y 32 años, y un hombre de 31 años, por los
grupos del GAULA de Risaralda y Tolima, fue desarticulada una red de extorsión
que delinquía en ambos departamentos afectando principalmente a comerciantes,
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teniendo como enlace a varios
internos de la cárcel La Picaleña de Ibagué.
De acuerdo con la coronel Alexandra Díaz Gómez, comandante de la Policía
Metropolitana de Pereira, las capturas de los integrantes del grupo conocido
como ‘Los Pájaros’, se ejecutaron en Quinchía, Risaralda; el municipio de
Florida en el Valle del Cauca e Ibagué capital del Tolima.
“Se logra la desarticulación del grupo delincuencial ‘Los Pájaros’, esta
actividad operacional fue adelantada en el municipio de Quinchía, Florida e
Ibagué, logrando la materialización de la captura de dos mujeres y un hombre,
los hoy capturados con internos recluidos en la cárcel Picaleña de Ibagué,
realizaban extorsiones a comerciantes de la capital risaraldense y la capital
del Tolima, bajo la modalidad de entornos digitales”, explicó la comandante Díaz
Gómez.
Esta modalidad es conocida también como Tío – Tío, consiste en que llaman a una
persona, asumiendo la posición de uno de sus familiares y en medio de la
conversación, que es usualmente en un tono acelerado y angustioso, le piden
dinero para reclamar un paquete, pagar una deuda u otra gestión que es urgente,
es así como logran que la víctima caiga en el engaño y les consigne o entregue
el dinero, lo que se hacía regularmente en Pereira, para luego ingresarlo a la
cárcel en Ibagué en los días de visita conyugal, cuando las mujeres se
presentaban como parejas de los internos que hacían parte de la red.
Informó la coronel Díaz Gómez que, con estas capturas se pudieron esclarecer
tres casos registrados en Pereira y uno más en Ibagué.
Hallaron dos cadáveres embolsados en Medellín y
Copacabana
Dos hombres que estaban desaparecidos desde los dos últimos días de enero en
Medellín y El Carmen de Viboral aparecieron muertos en las últimas horas en el
corregimiento San Antonio de Prado y Copacabana.
Entre las víctimas se encontraba el ingeniero agroindustrial del Oriente
antioqueño, David López Gaviria, de 28 años, quien estaba desaparecido desde el
31 de enero en El Carmen de Viboral, cuando salió en su motocicleta de alto
cilindraje.
Desde el momento de su desaparición sus familiares entregaron carteles por toda
la subregión para quien entregara información sobre su paradero, pero la
búsqueda finalizó en la tarde del domingo, cuando en un matorral de la vereda
Peñolcito, de Copacabana, a un costado de la autopista Medellín-Bogotá, las
autoridades encontraron su cadáver.
De acuerdo con los registros judiciales, el cuerpo de este ingeniero
agroindustrial tenía una bolsa blanca en la cabeza que cubría el papel vinipel
con el cual envolvieron su rostro.
La identificación de este joven se logró, luego de que sus familiares hicieran
presencia en el sitio y reconocieran el vestuario que lucía en el momento de su
desaparición y que coincidía exactamente con el del cadáver hallado.
El cadáver fue trasladado a Medicina Legal para realizar las labores judiciales
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correspondientes y establecer
mediante el dictamen forense si se trata plenamente de David.
Además del caso de este joven, este fin de semana se registró un segundo
hallazgo de un cadáver embolsado en la vereda Laverde, zona rural del
corregimiento San Antonio de Prado, de Medellín.
En esta zona, las autoridades encontraron empacado en un costal el cuerpo de
Sebastián Quiceno Restrepo, de 31 años, quien se encontraba desaparecido desde
el 30 de enero, cuando se lo llevaron en un vehículo particular desde las 11:00
de la noche de ese miércoles, de su casa en la vereda Las Camelias, de este
mismo corregimiento.
Presunta cabecilla de Los Costeños “La
mona” aclara que no la han asesinado
Durante el fin de semana trascendió la noticia de que Mayra Alejandra Vera
Duarte, conocida como “La Mona”, había sido asesinada en el municipio de
Sabanagrande, Atlántico, cuando se encontraba en un salón de belleza del barrio
Los Caracoles, arreglándose las uñas.
Vera Duarte presuntamente era miembro de la banda criminal los Costeños y se
encargaba de dirigir acciones criminales en la zona oriental del departamento,
más concretamente en los municipios de Sabanagrande, Santo Tomás y Palmar de
Varela. Estaba bajo las órdenes de Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor,
quien está privado de la libertad y con quien sostenía una relación sentimental.
La mujer había sido capturada el 6 de mayo del año pasado dentro de una
investigación por concierto para delinquir. En ese momento, le encontraron un
arma de fuego tipo revólver calibre 38 largo, 40 panfletos extorsivos y más de
cien dosis de cocaína.
Estaba recluida en la cárcel El Buen Pastor de Barranquilla por el delito de
porte, tráfico de estupefacientes, porte ilegal de arma de fuego y concierto
para delinquir. De todas formas, quedó en libertad el 15 de enero pasado, veinte
días atrás, mientras se recopilan más pruebas dentro de la investigación.
Varios medios registraron su muerte, pero su apoderado le aseguró que su clienta
no había sido la víctima del ataque sicarial del sábado 3 de febrero. Así mismo,
la mujer se comunicó con ese medio para demostrar que sigue viva.
“Nadie me ha matado, estoy viva”, exclamó la mujer y le atribuyó la confusión a
que las autoridades suelen ponerle el mismo alias a varias personas. Añadió que
se había enterado de su supuesta muerte por los medios de comunicación y que
quería aclarar el tema por su propia seguridad.
El abogado, por su parte, manifestó que, aunque su clienta sigue vinculada al
proceso por concierto para delinquir, se encargará de demostrar que todas sus
conductas han sido completamente legales.
A la que sí mataron el sábado pasado fue a Leidy Dianis Rincón Díaz, de 29 años,
que, aunque también respondía al alias de “La Mona”, no es la misma mujer
vinculada a la banda Los Costeños y quien fuera la pareja sentimental de alias
Castor.
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