Las sanciones para Google en EE.UU.
buscan frenar el monopolio ilegal de su Play Store
En diciembre, un jurado declaró que Google había infringido las
leyes antimonopolio de Estados Unidos mediante acuerdos y normas de
facturación que daban un impulso injusto a su tienda de aplicaciones
Google Play. El jueves, un juez empezó a establecer el modo en que
se obligaría a la empresa a modificar su negocio como sanción. Las
soluciones que se están considerando darían lugar a la mayor
sacudida de la historia del dominio de Google sobre el universo
Android.
¿Qué sanciones debería pagar Google por su conducta monopólica?
El desarrollador del videojuego Fortnite, Epic Games, que venció a
Google en el caso en el que se determinó que la Google Play Store
era un monopolio ilegal, pide al juez federal James Donato que
prohíba a la empresa celebrar contratos que disuadan a la
competencia. Epic también quiere que se obligue a Google a ayudar a
las tiendas competidoras a listar más apps, dándoles un impulso
competitivo. Los cambios permitirían a Epic hacer realidad su plan,
que lleva tiempo persiguiendo, de aumentar sus ingresos procesando
las compras dentro del juego en Fortnite y otros títulos sin
recurrir al sistema de pago de Google, y comercializando los títulos
a través de su propia tienda de aplicaciones.
Google sostiene que las exigencias de Epic amenazarían la seguridad
de sus usuarios y perjudicarían los negocios de sus socios,
incluidos los fabricantes de dispositivos Android y los
desarrolladores de apps. La empresa de búsquedas está apelando el
veredicto del jurado, lo que retrasaría la implementación de las
sanciones durante muchos años, o las anularía por completo. Pero en
los últimos años Google ya ha tenido que realizar algunos costosos
cambios en Europa y Asia debido a derrotas en los
tribunales y a nuevas
leyes que afectan a la Play Store, y actualmente se está disputando
un juicio con Epic en Australia.
“Quiero ser claro:
Google, como monopolista ilegal, tendrá que pagar algunas
sanciones”, comunicó Donato a Epic y Google en una audiencia
celebrada el jueves en San Francisco. Explicó que la
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penalización de Google le
obliga a abrir el cerco de la compañía sobre el ecosistema Android de forma que
acabe con el monopolio ilícito de la organización y también elimine sus
ganancias obtenidas indebidamente tras años de dominio injusto.
Eso supondría cambios importantes para la industria que se ha creado alrededor
del sistema operativo Android de Google, y potencialmente más opciones para los
consumidores. Tal vez sea necesario que la empresa invierta dinero en nuevos
proyectos para corregir la situación, destacó Donato.
El juez expresó su frustración ante las declaraciones de Google de que cualquier
modificación sería perjudicial para los consumidores y otras entidades. “Saltar
de alegría y decir que el nuevo modo de proceder se traducirá en un mundo en el
que nadie querrá vivir, carece de fundamento”, afirmó. Pero también dedicó horas
de la audiencia a interrogar a dos economistas, uno en nombre de cada empresa,
sobre la forma de elaborar sanciones para Google sin que fueran irrazonables.
Las peticiones de Epic Games
Entre las peticiones de Epic está que se prohíba a Google llegar a acuerdos que
impidan o disuadan a las empresas de trabajar con alternativas a su tienda de
aplicaciones. Anteriormente, la compañía exigía a las firmas de hardware que
querían ofrecer Google Play en sus dispositivos que se comprometieran a no
trabajar con tiendas alternativas ni a promocionarlas. Eso impedía que la
mayoría de los consumidores conocieran otras opciones, ya que la mayoría de los
fabricantes de dispositivos prefieren la
tienda de aplicaciones de Google, porque
es la más grande.
Las tiendas de aplicaciones rivales, como las de Amazon y Samsung, también han
tenido dificultades para convencer a los desarrolladores de que muestren sus
apps fuera de Google Play, porque mantener las aplicaciones en varias
plataformas supone un trabajo extra. Para igualar las condiciones, Epic propone
que se exija a Google durante seis años que facilite a las tiendas
rivales una forma de listar las apps
alojadas en Google Play. Eso permitiría a la gente navegar por otras
alternativas sin tener la sensación de que se pierden de aplicaciones populares,
lo que daría a la
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tienda más posibilidades de éxito a
largo plazo.
“Las tiendas de apps rivales contarían con incentivos para dar de alta a los
desarrolladores, de modo que obtengan flujos de ingresos y no se queden
estancadas cuando expire esta disposición”, expresó Douglas Bernheim, economista
de la Universidad de Stanford que testificó en nombre de Epic, a Donato. “Google
tendría motivos para seguir incorporando desarrolladores para no estar en
desventaja”.
Matthew Gentzkow, economista de Stanford del lado de Google, respondió que los
desarrolladores resultarían perjudicados si sus aplicaciones aparecieran en
tiendas alternativas que cuentan con políticas de contenido más relajadas que
las de Google, porque en ese caso sus apps aparecerían junto a, por ejemplo,
aplicaciones de pornografía que Google prohíbe. “Afectaría su marca y su
reputación ante los usuarios”, resaltó Gentzkow.
Donato también planteó cuestiones sobre cómo aligerar el requisito de Google de
que las apps de la Play Store utilicen el sistema de facturación de la compañía
para procesar los pagos, una de las normas que desencadenaron la demanda de Epic.
Y expresó su deseo de encontrar una manera de “reducir la fricción”, como la
llamó, a la que se enfrentan los usuarios cuando intentan descargar una
aplicación de una tienda distinta de Play en dispositivos Android. Se sabe que
el sistema operativo de Google interrumpe el proceso con una serie de
advertencias de que omitir Play plantearía problemas de seguridad, lo que podría
disuadir a los usuarios de seguir adelante con la descarga.
Se espera que Donato escuche los argumentos finales de Google y Epic en agosto.
Informó a los abogados que, entonces, emitiría oficialmente las sanciones antes
de las vacaciones del Día del Trabajo de Estados Unidos, en septiembre, pero
después se corrigió, afirmando que llegarían “pronto”. |