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Lluvias generan caos vial en
la vía Panamericana entre Risaralda y Chocó: paso restringido y
comunidades en alerta
Las intensas lluvias que han azotado el occidente de Risaralda en
los últimos días dejaron como saldo varios deslizamientos de tierra
que mantienen parcialmente bloqueada la vía Panamericana, una
arteria clave que conecta este departamento con el vecino Chocó. El
tramo más afectado se encuentra entre Santa Cecilia y Pueblo Rico,
donde el paso de vehículos ha quedado restringido a un solo carril.
El panorama en la zona es complejo. Cientos de camiones cargados con
alimentos y mercancía se vieron obligados a detener su marcha
durante horas, generando una fila de vehículos varados que inquieta
tanto a autoridades como a conductores. Néstor Cardona, miembro del
Cuerpo de Bomberos de Pueblo Rico, explicó que la vía estuvo
completamente cerrada por lo menos en dos puntos críticos debido a
los derrumbes.
“La recomendación es no avanzar hacia los puntos de bloqueo. Es
preferible que los transportadores busquen albergue en los centros
poblados cercanos, donde puedan comer y descansar con seguridad.
Aglomerarse en la carretera representa un riesgo innecesario”,
comentó Cardona.
Aunque maquinaria amarilla logró habilitar un carril en horas de la
noche, persiste la amenaza de nuevos deslizamientos. En sectores
como la vereda Remolinos, un vehículo quedó atascado por el flujo de
sedimentos, aunque afortunadamente el conductor resultó ileso.
La situación no solo afecta a los transportadores. En los resguardos
indígenas del corregimiento de Santa Cecilia se reportan emergencias
por la posible socavación de una quebrada y nuevos derrumbes. Los
organismos de socorro continúan monitoreando estas zonas apartadas,
muchas de ellas de difícil acceso.
Alfredo Muñoz, director de la Defensa Civil en Risaralda, confirmó
que los 14 municipios del departamento están en alerta, la mayoría
en nivel rojo por riesgo de crecientes súbitas. En las últimas
horas, otro deslizamiento bloqueó la vía entre Quinchía e Irra,
situación que también está siendo atendida por las autoridades.
65 familias en Santa Rosa de Cabal
celebran mejoras en sus viviendas
En medio de sonrisas, palabras de gratitud y hogares transformados,
65 familias de Santa Rosa de Cabal recibieron una mejora sustancial
en sus viviendas gracias al programa nacional
Cambia mi Casa, liderado en Risaralda por la Gobernación y la
Empresa de Desarrollo Territorial, Urbano y Rural (EDUR).
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Con una inversión de 735 millones de
pesos,estas intervenciones llegaron directamente
a quienes más lo necesitaban. Baños, cocinas, pisos y paredes
fueron renovados, marcando un antes y un después en la vida de decenas de
familias.
María Consuelo Sánchez, una de las beneficiadas, no ocultó su emoción: “Para mí
es una alegría y un orgullo este regalo. Mi nieta ahora llama la casa su 'casita
de oro'. Esta ayuda llegó justo cuando atravesamos un momento difícil por temas
de salud”.
Flor de María Marín también expresó su agradecimiento. “Antes la situación era
muy complicada. Mi nieta gateaba sobre el cemento, se ensuciaba mucho. Ahora
tenemos piso nuevo y la casa es otra. Todo está más limpio, más bonito”.
Juliana Franco, por su parte, resaltó cómo el cambio impactó a toda la familia.
“La casa de mi abuela era húmeda, fría. Hoy es un hogar cálido y seguro. Esta
transformación era lo que necesitábamos para vivir dignamente”.
Estos mejoramientos hacen parte de una inversión de casi 10 mil millones de
pesos que beneficiará a 555 familias en Pereira, Dosquebradas, La Virginia y
Santa Rosa. El gobernador Juan Diego Patiño Ochoa reiteró que esta alianza entre
Nación y Departamento tiene un objetivo claro: dignificar la vida de las
familias más vulnerables y fortalecer el tejido social del territorio.
Luz verde para proyecto clave de transmisión eléctrica en el suroccidente
colombiano: ANLA autoriza línea La Virginia – Alférez
La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) autorizó finalmente la
construcción de la línea de transmisión eléctrica La Virginia - Alférez, una
obra estratégica del Grupo Energía Bogotá (GEB) que promete transformar el
panorama energético en Antioquia, Caldas, Risaralda y Valle del Cauca.
Con una longitud de 207 kilómetros, esta línea de 500 kilovoltios conectará las
subestaciones de La Virginia, en Risaralda, con Alférez, en el Valle,
atravesando 17 municipios. Su propósito no es solo mejorar la cobertura
eléctrica, sino también garantizar la confiabilidad del servicio y avanzar en
procesos de electrificación rural e industrial.
Juan Ricardo Ortega, presidente del GEB, destacó que esta infraestructura
permitirá también impulsar el uso de vehículos eléctricos y dinamizar el
desarrollo económico en regiones históricamente rezagadas en materia energética.
“Estamos hablando de una obra que pone al suroccidente colombiano a la altura de
las necesidades del futuro”, aseguró.
Por su parte, Irene Vélez, directora de la ANLA, resaltó que esta es la línea de
mayor capacidad que se puede construir hoy en Colombia. El proyecto, sin
embargo, tuvo que sortear varios obstáculos. El proceso de licenciamiento
arrancó en agosto de 2022, pero fue suspendido casi por año y medio debido a la
necesidad de realizar consultas previas con comunidades locales.
La licencia se otorgó en noviembre de 2024, aunque inicialmente con
restricciones que inviabilizaban la construcción de 16 torres.
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Tras un recurso de reposición
presentado por el GEB, se logró viabilizar la construcción
de 14 torres. Las dos restantes están en evaluación técnica para determinar si
se pueden levantar con diseños alternativos, como estructuras más altas.
La obra demandará una inversión cercana a los 70 millones de dólares y su
construcción tomará aproximadamente 18 meses.
En paralelo, avanza otro proyecto vital: la línea Colectora, que permitirá
evacuar la energía eólica generada en La Guajira. El primer tramo estaría listo
en septiembre de 2025 y el segundo en agosto de 2026. Este proyecto será clave
para reducir tarifas en la región Caribe y diversificar sus fuentes de energía.
“Estamos sembrando la infraestructura que el país necesita para crecer con
energía limpia, estable y asequible”, concluyó Ortega.
Lotería de Risaralda y Fiscalía se alían para
combatir la ilegalidad en juegos de azar
En una muestra de compromiso institucional, la Lotería del Risaralda y la
Fiscalía seccional del departamento se reunieron para definir acciones conjuntas
que fortalezcan la legalidad en los juegos de suerte y azar. El encuentro,
liderado por la gerente de la Lotería, Bibiana Garcés González, y el director
seccional de Fiscalías, César Bolaños, dejó sobre la mesa una ruta clara: unir
esfuerzos para frenar el crecimiento de la ilegalidad en apuestas como rifas y
chance, que afectan directamente los recursos destinados a la salud pública.
Durante la reunión, la Lotería presentó su programa de legalidad y
fiscalización, destacando el trabajo que ya se viene desarrollando en los
municipios. Se identificaron puntos críticos donde la intervención de la
Fiscalía será clave, tanto para la denuncia como para el acompañamiento en
procesos de formación y sensibilización ciudadana.
“El compromiso del departamento, especialmente de la Gobernación en cabeza del
doctor Juan Diego Patiño Ochoa, es luchar sin tregua contra la ilegalidad en los
juegos de azar. Esto no solo impacta negativamente a los operadores legales,
sino que pone en riesgo los recursos que deben llegar a nuestros hospitales y
centros de salud”, expresó Garcés González.
La funcionaria también valoró positivamente la disposición de la Fiscalía para
sumarse activamente a este esfuerzo conjunto. “El doctor Bolaños manifestó su
interés en construir un protocolo de acción claro y accesible para que tanto las
comunidades como los gobiernos locales sepan cómo actuar ante casos de
ilegalidad”, añadió.
Además de esta reunión, la Lotería también se articuló con la Policía Nacional
para definir operativos conjuntos que permitan frenar las apuestas clandestinas.
Este trabajo hace parte del programa de legalidad y fiscalización que lidera la
entidad, el cual busca no solo castigar, sino también educar y sensibilizar
sobre la importancia de jugar legalmente.
Desde la Lotería recalcan que, más allá de una apuesta económica, se trata de
una apuesta ética por el bienestar de todos los risaraldenses.
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