Presidente de Panamá se quedó esperando a Petro en
cumbre de la AEC

Una vez más, la ausencia del presidente Gustavo Petro marcó un evento de
relevancia internacional. El mandatario colombiano no asistió a la 10ª Cumbre de
Jefes de Estado y/o Gobierno de la Asociación de Estados del Caribe (AEC),
celebrada este jueves en Montería, Córdoba.
La reunión, calificada como la más
importante del año para la asociación, contó con la presencia de líderes
regionales, incluido el presidente de Panamá, José Raúl Mulino.
La canciller Laura Sarabia fue la encargada de representar al Gobierno
colombiano y anunció que la inasistencia de Petro obedeció a "razones de fuerza
mayor", sin precisar los detalles del impedimento. "El presidente no pudo
desplazarse desde Bogotá, pero su corazón y su sentimiento caribeño siempre nos
acompañan", expresó Sarabia en su intervención.
Pese a su ausencia física, Petro envió un
mensaje a través de un discurso leído por la
canciller, en el que ratificó el compromiso de Colombia con la integración
regional. En el texto, el mandatario subrayó la importancia de ejercer soberanía
sobre el mar Caribe y sus recursos, y propuso repensar los corredores
estratégicos de transporte multimodal que conecten el país.
“Esta también es una oportunidad para repensar nuestros impulsos, esos
corredores estratégicos de transporte que conectan por barco y trenes, no solo
camiones, las ciudades con los ríos, y los ríos con el mar”, destacó.
Además, insistió en la lucha contra
el cambio climático, mencionando los esfuerzos conjuntos entre Colombia y Panamá
para desarrollar una red eléctrica de más de 500 kilómetros basada en energía
limpia. “Debemos hacer del Caribe el verdadero motor de la energía renovable”,
sentenció Petro.
Sin embargo, su reiterada falta de puntualidad e inasistencias a compromisos
oficiales continúa generando polémica. Según medios como La Silla Vacía e
Infobae Colombia, entre agosto de 2022 y diciembre de 2023, el presidente habría
incumplido más de 100 compromisos oficiales. Estas ausencias han sido blanco de
críticas de diversos sectores, incluida la oposición.
El senador Miguel Uribe, actual aspirante a la Presidencia, fue
uno de los que reaccionó con dureza. En su cuenta de X, compartió un video
criticando al presidente: “Un país que madruga a trabajar no merece un
presidente que no lo hace”.
Por presunto acoso laboral denuncian a la
representante Leyla Rincón

La representante a la Cámara por el Huila, Leyla Marleny Rincón Trujillo, fue
denunciada por presunto acoso laboral ante la Comisión Legal de Acreditación de
la Cámara de Representantes. La documento, firmado por la abogada Lina Paola
Suárez Bedoya, excoordinadora de su Unidad de Trabajo Legislativo (UTL), detalla
un comportamiento sistemático de maltrato, humillaciones, discriminación por
motivos de salud mental y un ambiente laboral hostil durante su permanencia en
el equipo de la congresista.
Entre los hechos relatados en el
escrito, se afirma que la representante Rincón manifestaba de manera reiterada
que su equipo de trabajo “no servía para nada” y menospreciaba las
capacidades profesionales de sus colaboradores. La denunciante asegura que
Rincón solicitaba contratar un abogado “grande”, desestimando su labor
como jurista, y se refería despectivamente a los
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comunicadores del
equipo como “comunicadores de vereda”.
Además, la congresista habría expresado comentarios peyorativos sobre el origen
regional de sus asesores, señalando que “los huilenses son unos estúpidos” por
no apoyar a su candidato a la Alcaldía de Neiva, Héctor Javier Osorio.
Discriminación por salud mental
Uno de los aspectos de la denuncia está relacionado con la discriminación por
motivos de salud mental. Suárez Bedoya relata que tras compartir recomendaciones
médicas emitidas por su psiquiatra, la congresista divulgó información privada
—incluyendo reportes clínicos y citas médicas— a terceros ajenos al proceso,
como su amiga y compañera de UTL, Patricia Bohórquez Piña.
“¿Otra vez enferma?, debo es montar una EPS aquí”, habría sido una de las frases
recurrentes de la congresista, lo cual, según la denuncia, incrementó la
sensación de vulnerabilidad, estrés y ansiedad en la denunciante.
También se denuncia que la representante exigía
disponibilidad total, sin fijar horarios laborales, e incluso llamaba a su
equipo antes de las 6:00 a.m., en la noche, fines de semana y días festivos, sin
respetar licencias médicas ni hospitalizaciones.
“Una estrategia política”: la respuesta de Leyla Rincón
En un comunicado a la opinión pública, la congresista negó categóricamente las
acusaciones, afirmando que se trata de una “violencia digital” orquestada en su
contra en el marco de un año electoral.
“Después de más de 50 años de ejercicio docente,
hoy me veo sometida por vez primera a calumnias y mensajes de odio. Es un
acuerdo político para acabar con la única inversión que he usado en mi campaña:
el afecto de mis alumnos, la confianza de mis colegas y mi convicción
ambientalista”.
Asimismo, anunció que iniciará acciones legales y que recurrirá a la Ley 2453 de
2025, enfocada en el rechazo a la violencia política contra las mujeres.
“No cederé al chantaje ni a la extorsión. Mis actuaciones están regidas por la
ética y me resisto a pagar por evitar los comentarios en redes”, declaró.
Carlos Ramón González renunció al Partido Verde

Carlos Ramón González, exdirector del Departamento Administrativo de la
Presidencia (Dapre) y uno de los fundadores de la Alianza Verde, presentó su
renuncia irrevocable al partido luego de ser imputado por la Fiscalía en el
marco del escándalo de corrupción relacionado con el saqueo a la Unidad Nacional
para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd).
La decisión fue confirmada por su abogado, el penalista Iván Cancino, quien
afirmó: “Puedo confirmar, para alejar cualquier duda, que Carlos Ramón González
efectivamente presentó carta de renuncia al partido Verde”.
La dimisión se produjo en medio de una creciente presión desde dentro de la
colectividad. Cristian Avendaño, representante a la Cámara por el mismo partido,
había solicitado por medio de sus redes sociales la expulsión inmediata,
argumentando que “no puede ser que un partido que enarbolaba la bandera de la
lucha anticorrupción ahora se vea enlodado por el caso de corrupción más grande
que ha tenido este Gobierno”.
La salida del exdirector del Dapre se suma a la suspensión de otros dos miembros
de alto perfil: Sandra Ortiz, exconsejera para las regiones, e Iván Name,
expresidente del Senado, quienes también están vinculados a la red de corrupción
en la Ungrd.
Sobre la imputación
Según la Fiscalía, habría orquestado, junto con el exdirector de la Ungrd,
Olmedo López, y su exsubdirector, Sneyder Pinilla, la distribución de $70.000
millones en contratos dirigidos a influenciar a congresistas clave a cambio de
respaldo a las reformas del Gobierno de Gustavo Petro.
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Entre los beneficiarios estarían Iván Name, quien habría recibido $3.000
millones en efectivo, y Andrés Calle, presidente de la Cámara, quien habría
recibido $1.000 millones. González fue imputado por cohecho por dar u ofrecer,
peculado por apropiación en favor de terceros y lavado de activos, cargos que no
aceptó durante una audiencia virtual desde el extranjero.
"No, honorable magistrado, no acepto los cargos dado que todos son calumnias sin
fundamento", declaró González, quien se encuentra fuera del país desde noviembre
de 2024, posiblemente en Europa. Aunque hay rumores de que estaría tramitando un
asilo político, no existe confirmación oficial.
La sombra de González en el partido
Aunque ya no pertenece oficialmente a la Alianza Verde, fuentes dentro del
partido advierten que Carlos Ramón González podría seguir influyendo en
decisiones clave. Uno de sus aliados, Rodrigo Romero, ocupa un cargo de
dirección dentro de la colectividad, y se especula que González aún tendría
poder en la definición de avales para las elecciones presidenciales y
parlamentarias de 2026.
Las reacciones
El representante Cristian Avendaño celebró la renuncia, afirmando que era un
paso necesario para recuperar la coherencia ética de la colectividad. Recordó
que fue el primero en exigir su salida tanto de la Dirección Nacional de
Inteligencia como del partido, tras conocerse su presunta implicación en el
escándalo de la UNGRD.
Por su parte, el representante Cristian Avendaño celebró la dimisión de Carlos
Ramón González al Partido Alianza Verde, destacando que su salida era necesaria
por estar vinculado al escándalo. Reafirmó que el partido debe depurarse y
recuperar su bandera anticorrupción, y exigió que González responda ante la
justicia.
Fue el primero en pedir su salida tanto del partido como de la Dirección
Nacional de Inteligencia.
Gobernador Carlos Amaya confirma que no será
candidato presidencial

El gobernador de Boyacá, Carlos Amaya, anunció que no será candidato a la
presidencia de Colombia. A través de un emotivo video publicado en su cuenta
oficial de X (antes Twitter), el mandatario boyacense explicó los motivos de su
decisión, resaltando su compromiso con su departamento.
“No renunciaré al honor de seguir sirviendo como gobernador de esta tierra
bendecida por Dios”, afirmó Carlos Amaya desde el campo boyacense.
El mandatario expresó su gratitud hacia los boyacenses por el respaldo que ha
recibido durante su trayectoria política. Afirmó que, aunque ha tenido la
posibilidad de proyectarse como presidenciable, su prioridad es culminar su
mandato como gobernador de Boyacá, cargo que considera “el mayor honor” de su
vida.
En su declaración, Amaya hizo énfasis en su sueño de construir una Colombia más
justa y digna, y reiteró que seguirá trabajando desde su actual responsabilidad
por el bienestar del departamento y del país.
“Gracias a su confianza y esperanza, hoy el hijo de un campesino puede soñar con
muchas posibilidades de ser presidente. Pero ser boyacense también significa
constancia y compromiso”, expresó.
Con este anuncio, el panorama político de cara a las elecciones presidenciales
de 2026 sufre un giro, ya que Carlos Amaya era considerado una de las figuras
emergentes con mayor proyección dentro del centro político colombiano.
El gobernador cerró su mensaje asegurando que no renunciará a su sueño de
transformar al país desde las bases, afirmando que seguirá trabajando "duro pa'
duro" por una Colombia donde “toda voz valga y ninguna vida sea olvidada por el
Estado”.
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