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Golpe al narcotráfico en el Eje
Cafetero: incautadas cinco toneladas de marihuana
En una
operación coordinada por la Policía Nacional, fueron incautadas
cinco toneladas de marihuana en la vía que conecta Mediacanoa con La
Virginia, en el departamento de Risaralda. El hallazgo, según
confirmaron las autoridades, representa uno de los golpes más
contundentes al narcotráfico en lo que va del año en la región.
El cargamento, que tenía como destino el departamento de Antioquia,
viajaba oculto entre productos de aseo en un tractocamión procedente
de Cali. El conductor del vehículo fue capturado en el acto y
enfrenta cargos por tráfico, fabricación y porte de estupefacientes
agravado.
“Este tipo de operativos no solo evidencian la capacidad de las
organizaciones criminales para mimetizar sus actividades, sino
también la eficacia de nuestros uniformados en los corredores
estratégicos del país”, afirmó el brigadier general Carlos Fernando
Triana Beltrán, director de la Policía Nacional, a través de su
cuenta oficial en X.
El valor estimado de la droga incautada en el mercado ilegal supera
los 10.000 millones de pesos. Según las autoridades, este alijo iba
dirigido a redes de distribución en el Eje Cafetero, el centro del
país y, especialmente, Antioquia, una de las regiones donde las
estructuras del narcotráfico mantienen influencia y mercado.
La vía Mediacanoa - La Virginia se ha convertido en un punto clave
para las rutas del narcotráfico, debido a su conexión estratégica
entre el suroccidente del país y el interior. Esta incautación se
suma a otras acciones adelantadas por la Policía en 2025, año en el
que ya se han decomisado más de 120 toneladas de marihuana en
distintos operativos.
El caso ha despertado preocupación entre los habitantes de la
región, quienes ven cómo estas rutas de tráfico atraviesan zonas
rurales y poblaciones vulnerables. Para muchos, cada tonelada
incautada representa no solo una victoria institucional, sino un
respiro para sus comunidades.
Denuncia por violencia política sacude
la Gobernación de Risaralda
El
ambiente político en Risaralda se ha visto sacudido tras la denuncia
pública de la diputada Paola Andrea Nieto Londoño, quien aseguró
haber sido víctima de violencia política por parte de funcionarios
de la Gobernación. Aunque no mencionó nombres
ni entregó detalles específicos, su pronunciamiento generó inquietud
en distintos sectores del departamento y abrió un nuevo
frente de debate sobre el respeto entre poderes.
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En respuesta, el
gobernador Juan Diego Patiño Ochoa se pronunció con un tono conciliador. Desde
su despacho, invitó a la diputada a un diálogo directo para escuchar sus
inquietudes y esclarecer los hechos. “Invito a la honorable diputada Paola
Andrea Nieto Londoño a que se acerque, hable directamente conmigo y podamos
llegar a una conclusión sobre cuáles son esos funcionarios que, según ella, han
tenido un comportamiento inadecuado. Si ha habido algún maltrato, tomaremos las
medidas necesarias”, expresó el mandatario.
Patiño destacó que su administración ha mantenido una política de puertas
abiertas, tanto para aliados como para quienes ejercen una oposición crítica.
Insistió en que el respeto, la inclusión y el diálogo son principios
innegociables de su gobierno. “Este ha sido un gobierno que reconoce el valor
del control político y busca siempre trabajar en equipo por el bienestar de
Risaralda”, añadió.
El caso ha puesto sobre la mesa un tema sensible pero urgente: la violencia
política, especialmente cuando afecta a mujeres en cargos de representación.
Organizaciones defensoras de los derechos políticos de las mujeres han
manifestado su preocupación, recordando que este tipo de violencia limita la
participación democrática y exige una respuesta institucional clara y efectiva.
Expertos en
gobernabilidad coinciden en que el fortalecimiento democrático pasa por
garantizar condiciones dignas y seguras para todos los actores políticos. Por
ello, el llamado del gobernador a resolver el conflicto mediante el diálogo ha
sido recibido con atención, aunque también con expectativa. La comunidad espera
que no se quede en palabras y que, de haber responsabilidades, se asuman con
transparencia.
Por ahora, el caso permanece abierto, con la mirada de la opinión pública puesta
en los pasos que seguirán tanto la diputada como la administración
departamental.
Bus del accidente en puente Helicoidal no estaba
autorizado
A casi dos semanas
del trágico accidente ocurrido en el puente Helicoidal del Quindío, nuevas
revelaciones han agitado a la opinión pública. Durante el primer Consejo
Territorial de Seguridad Vial realizado en el departamento, el Ministerio de
Transporte confirmó que el bus que transportaba estudiantes de la Universidad
Alexander Von Humboldt no estaba autorizado para prestar ese servicio.
Las conclusiones preliminares son inquietantes. Francisco Taborda, jefe de la
oficina jurídica del Ministerio, expuso que el vehículo accidentado no
correspondía al que había sido inicialmente contratado. De hecho, no existe
evidencia de un contrato formal entre la universidad y la empresa que
supuestamente debía prestar el servicio, con sede en Armenia. Más grave aún, el
bus pertenecía a una firma registrada en Cúcuta, cuya dirección corresponde a
una casa familiar y no a una sede comercial.
“Estamos ante una situación que
implica no solo negligencia, sino también posibles irregularidades penales. No
hay pruebas de un convenio empresarial que permitiera la subcontratación entre
las empresas involucradas”, afirmó Taborda durante la
sesión, que contó con la participación de
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delegados de
Armenia, Filandia, Calarcá, La Tebaida y Córdoba.
El accidente, ocurrido el pasado 24 de mayo, dejó varias víctimas fatales y
heridos, sumiendo en el dolor a familiares y a toda la comunidad universitaria.
Lo que parecía un siniestro más en las carreteras del país, hoy se perfila como
un caso emblemático de omisión y falta de control.
La Superintendencia de Transporte también entregó un informe con tres hallazgos
claves: no hubo reporte del plan de seguridad vial por parte de la universidad,
no existe un contrato formal con la empresa inicialmente señalada, y no se ha
presentado respaldo legal a la subcontratación.
La Fiscalía ya recibió la documentación y adelanta una investigación penal. El
conductor podría enfrentar cargos por homicidio culposo, y la universidad,
responder ante los entes de control.
El caso ha puesto sobre la mesa la urgente necesidad de reforzar la supervisión
en los servicios de transporte estudiantil. La tragedia del puente Helicoidal es
un llamado a no seguir improvisando cuando de vidas humanas se trata.
Maquinaria amarilla en Caldas ha intervenido más
de mil puntos críticos en lo que va del 2025
Con una intensidad
marcada por las lluvias y los desafíos en la red vial rural, el departamento de
Caldas ha tenido que redoblar esfuerzos en materia de mantenimiento y atención
de emergencias. Según el más reciente balance entregado por la Secretaría de
Infraestructura, entre enero y mayo de 2025, los llamados “combos de maquinaria
amarilla” han atendido 1.023 puntos críticos en vías del departamento.
Este despliegue, que
busca mantener la conectividad en zonas especialmente vulnerables, ha
intervenido un total de 876 kilómetros de vías. La mayoría de los trabajos se
han enfocado en la remoción de derrumbes —más de 76.200 metros cúbicos— y en la
estabilización de las vías con material afirmado, con una aplicación de 32.900
metros cúbicos.
Salamina, Viterbo y Marmato figuran entre los municipios con mayor cantidad de
kilómetros intervenidos, lo que refleja la necesidad de respuesta urgente en
zonas con alto riesgo geológico. Solo en mayo, las labores se intensificaron
debido a las lluvias: se intervinieron 269 kilómetros de vías y se retiraron
22.400 metros cúbicos de deslizamientos.
La maquinaria también realizó limpiezas de material de basureo, sumando más de
31.700 metros cúbicos, una tarea silenciosa pero fundamental para evitar
bloqueos y nuevas emergencias. Las subregiones más atendidas fueron Norte (137
km), Centro Sur 2 (129 km) y Magdalena 1 (110 km).
Estas cifras no solo muestran el trabajo técnico detrás de cada intervención,
sino también el compromiso de un equipo que ha hecho frente a la naturaleza para
garantizar que los caminos no se cierren para quienes más los necesitan. En
Caldas, la maquinaria amarilla no se detiene.
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