Fundado el 9 julio de 1948 -

Por Rafael Cano Giraldo -1948-1981

Publisher: Zahur K. Zapata - 1981 –

 

 

 

Las opiniones expresadas por los columnista son de su exclusiva responsabilidad y no comprometen el pensamiento de El Imparcial

 
 

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EDITORIAL

 

Pereira, Colombia - Edición: 13.253-833

Fecha: Jueves 02-05-2024

 

EDITORIAL

 

 

Falta conciencia

 

En Colombia falta conciencia. Conciencia ciudadana, conciencia en el trabajo y conciencia como seres humanos.

La falta de conciencia nos ha traído a este punto, este hilarante punto de frustración en donde no sabemos qué hacer con lo que anda mal. No sabemos qué hacer con las guerrillas, porque si seguimos la guerra los números de muertes y daños se incrementan, pero si concedemos el proceso de paz los daños y muertes se incrementan sólo de un lado. Evidentemente este problema proviene de la poca conciencia política que tenemos, en otras palabras, el no saber perfectamente por quien es que votamos, es la razón de la gran mayoría de males de nuestro país, puesto que terminamos eligiendo a la persona por el rostro que mostró en elecciones pero nunca no preguntamos cómo ha sido su modo de ser a través de su historia política, mostrando de esta manera que en muy pocas ocasiones la forma de solucionar las dificultades no es de nuestro agrado, o peor aún no dan soluciones.

Pero, esta falta de conciencia no es necesariamente una falacia existencial, sino económica, es decir, gastamos más tiempo trabajando que percibiendo, investigando y estudiando, claramente este es un problema como sociedad y el manejo que las empresas dan a sus trabajadores, privándolos de cualquier posibilidad de darse cuenta que es lo que necesitan. En efecto, dada esta imposibilidad que las empresas le dan a sus trabajadores, no es completamente normal que los políticos que ganan las elecciones por lo regular suelen contribuir de una u otra manera a las grandes empresas, dejando de tal manera al sujeto, con un cansancio tan grande que sólo le queda salir en un círculo vicioso infiniti.

No obstante, ¿En serio podríamos afirmar este círculo vicioso sin más? No deberíamos mostrarnos con resistencia ante este constante adormecimiento creado por la sociedad de consumo, después de todo en serio necesitamos todo en lo que gastamos o es acaso ahora nuestras pertenencias las que nos definen como sujetos, bueno de hecho ahora nuestro modelo de vida le dice mucho a la sociedad y nos volvimos dependientes de este mostrar y ver, auto- expropiándonos de nuestra identificación como humanos, ahora parecemos productos, siempre a la espera de ser vendidos de la mejor manera, aun cuando esta espera y preparación pueda llevarse todo lo mejor de nuestra propia existencia, entre ello, todo nuestro tiempo.

 

 

 

SOBRE AUTONOMÍA SOCIAL

 

 

Por: Zahur Klemath Zapata

zapatazahurk@gmail.com  

 

No nos podemos quejar de la democracia; la democracia es: cuando se eligen a individuos para que gobiernen a los electores a su saber y antojo sin que los electores puedan reclamar por los actos de los elegidos.

La democracia es el gobierno de los elegidos por la sociedad. La sociedad en una democracia está sometida a las leyes y reglamentos que ésta imponga. La forma de sobrevivir de una democracia es a través de impuestos, manejo del poder y la corrupción que ella establece para crear la criminalidad. La democracia no permite que la sociedad intervenga en sus asuntos y allí es donde se establece la represión contra los que protestan o reclaman una equidad, autonomía o libertad social.

 

Estamos viviendo en una democracia y eso es lo que hemos elegido establecer.

En verdad en eso es lo que tú quieres vivir.

 

El comunismo, el socialismo, la dictadura y la monarquía tienen los mismos principios y el mismo fin, gobernar a la sociedad a través de impuestos a toda costa.

La democracia va en contravía a la autonomía, porque la democracia es una institución administrada y dependiente de los políticos y estos son mantenidos a través del voto de unos pocos. Los políticos manipulan el concepto democracia como una ramera que vive de los impuestos producto del trabajo de los ciudadanos.

¿Entonces por qué apoyar el concepto de democracia?

La autonomía no es posible si existe la democracia o sistemas políticos afianzados en estos principios. Autonomía es la capacidad que tiene cada individuo de poder decidir por sí y organizarse como él considere adecuado en una sociedad que entre todos han construido. Todo esto basado en la autonomía de los individuos que son los que representan la nación, el Estado y las instituciones. Cuando se pueda entender este concepto, podemos considerarnos seres libres y autónomos. De lo contrario seremos esclavos de quienes representan la democracia.

Quienes gobiernan las naciones manipulan el intelecto social para fines personales y establecen su propio ejército como medida de represión a quienes no apoyan sus leyes y mandatos.

Los impuestos, la vacuna, la extorsión o cualquier medida que se aplique para recolectar dineros para sostener el sistema democrático, es imposición de quienes están al frente, porque ellos son los que al final van a usufructuar de esos impuestos y no la sociedad que los paga. Las
medidas que todo sistema democrático impone están basadas en el dominio de una sociedad que

 

 

 

 acepta esa imposición sin racionalizar el verdadero origen de esa imposición.

La sociedad ha logrado evolucionar paulatinamente a través de experiencias obtenidas en el manejo del Estado donde el individuo es conducido como borrego por los políticos de turno. Este manejo lo ha llevado a los más horribles holocaustos donde no ha habido escapatoria para ninguna persona que viva en ese dominio.

 

PETRO NO ES SANSÓN
Crónica # 872



Gustavo Alvarez Gardeazábal
Audio:

https://www.youtube.com/watch?v=_PGZlNUKqU8

Dentro de la tradición judeocristiana en que nos educaron, el nombre de Sansón ha servido para una y otra reflexión de rabinos y sacerdotes a la hora de predicar.

Su leyenda, la de haberse dejado cortar el pelo de Dalila, la filistea que lo embrujó para quitarle la fuerza monumental de que gozaba, ha servido para todas las generaciones y civilizaciones que se hicieron leyendo la Biblia.

Por estos días en Colombia, cuando el país se ha ido acostumbrando a ver a su presidente usando gorra juvenil para taparse la cabeza, pelada o remendada, las especulaciones sobre la causa que ocasiona tal uso de gorra, han servido para pasear a Petro entre las greñas que le cortaron a Sansón y las interpretaciones herejes de la senadora Maria Fernanda Cabal.

Pero aunque el embajador en Londres, Roy Barreras, se ha tranzado en una batalla verbal explicativa con la senadora para disipar los rumores sobre la gorra permanente y la cabeza pelada del presidente, ninguna de las feroces lenguas chísmicas bogotanas ha sido capaz de levantar un pedestal más contra Petro, imaginando la causa de su falta de pelo.

Por supuesto, hipótesis han corrido muchas, desde las que lo sitúan soportando la calvicie que genera una tratamiento de quimioterapia hasta las de cirujanos estéticos que han aseverado que se trata de un tratamiento contra la alopecia, es decir, que le estarían haciendo trasplantes de pelo.

Todo puede ser posible y si la vanidad que cada ser humano posee en distintos grados, no lo impidiera, los colombianos habríamos sabido la razón por la cual el presidente usa gorra.

Mientras eso sucede y Petro baje de su pedestal para informarnos como jefe de estado cuál es la razón de sus maluquerías y calvicies, dejemos que corra la exageración lenguaraz de que al presidente le pasa lo mismo que a Sansón y que hoy 1 de mayo, sabrá si perdió la fuerza con la que siempre soñó, amenazó y hasta asustó: la popular.

El Porce 2 de mayo del 2024

 

 

Director
Zahur Klemath Zapata

Gerente
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Gerente Operativo
Alba Lucia Arenas V.


Editor

Felipe Castro

 

   

Diagramación
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Soporte Tecnológico
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Colaboradores

Jotamario Arbeláez
Gustavo Álvarez Gardeazábal

 

 
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