El Renacer Del Fique

Desde 2006 existen cultivos en diferentes corregimientos y veredas que dieron origen a que se celebre allí en 2009 el noveno encuentro nacional de cultivadores de fique y artesanos de la cabuya, organizado por la gobernación de Risaralda con el concurso de la ONG de carácter ambiental Gerenciar Ideas Ambientales.

100.000 plantas, de las cuales, 50.000 en plena producción constituyen un importante capital en Villa Claret donde ya tienen creada la cultura de manejo del fique en los aspectos ambiental y agroecológico con responsabilidad social.

En estos aspectos relacionados con la cultura productiva y ambiental, ha sido fundamental el concurso de Agribiorgánica, cuyo director, Fernando Franco, indicó que están centrados en programas para reducir el impacto ambiental y para mejorar el nivel de vida a los fiqueros de Pueblo Rico.

Uno de los proyectos asociados al cultivo de fique que se está comenzando a promover es la diversificación para contribuir con un mejor flujo de caja para todas las familias fiqueras. Caña panelera y Maíz son los cultivos que perfectamente se asocian al fique.

El manejo ambiental del fique consiste en un centro de acopio y el traslado de la hoja a una planta en Pereira para el proceso de desfibrilado, evitando que este cultivo de laderas derrame lixiviados que puedan desviarse a las fuentes hídricas, consiguiendo así la captura total del lixiviado que se recupera en la elaboración de jabones artesanales e industriales y del bagazo destinado a la producción de compost.

Dentro de los planes para reactivar la economía fiquera de Pueblo Rico se considera necesario el mantenimiento de las vías terciarias, con los fondos de regalías disponibles, para revivir el encuentro que se realizó en la anterior gobernación de Victor Manuel Tamayo cuando se acogieron 280 cultivadores de los departamentos productores de fique:

Santander, Antioquia, Caldas, Cauca, Nariño, Boyacá y Risaralda para intercambio y actualización de experiencias e innovaciones.

Dé Clic al logo para descargar

la aplicación de la emisora

Foto cortesía

Nueva perspectiva para Pueblo Rico

Por: Ferley Henao Ospina
ferleyhenao@gmail.com

Pese a las diversas y repetidas crisis que han agobiado a las más 40.000 familias dedicadas al cultivo del fique en Colombia, una nueva luz de esperanza abre las puertas de un futuro mejor para el sector fiquero.

La necesidad de invertir el uso desmedido de plástico, acudiendo a formas de consumo que sean sustentables ante la contingencia ecológica que vive el planeta, están conduciendo al retorno de materiales que sí son amigables con el medioambiente: el fique, uno de ellos.

Las bolsas plásticas y otros tipos de empaques están siendo sustituidos por los de fibras naturales de diversas especies.

En esa misma dimensión es previsible que pronto regresemos a las botellas de vidrio para gaseosas, cervezas, leche, jugos, cuya característica retornable, lleva al proceso industrial a incluir el reciclaje repetido y continuo de los envases.
 

Para 2020 está contemplada la prohibición en muchos lugares del planeta, entre ellos Ciudad

de México el uso de bolsas, cubiertos, charolas y utensilios plásticos de un solo uso, abriendo paso a la industrialización de materiales vegetales para sustituir estas importantes demandas. El fique, aparece nuevamente en escena.

La fibra de fique se utiliza en la elaboración de sacos (empaques) para algunos productos agrícolas tales como papa, maíz, arveja, fríjol, cebolla y algunos de exportación como café y cacao.

Se producen también cabuyas, sogas y artesanías y se van a desarrollar otros usos.

Un punto para destacar es la producción de geotextiles y agromantos biodegradables que van a sustituir los fabricados con derivados del petróleo. Téngase en cuenta también la importancia del fique en la reforestación de taludes.

Para Pueblo Rico, expertos en la producción de fique, se abren aquí nuevas oportunidades de revitalizar una actividad de su natural vocación y vinculada culturalmente al campo Pueblorriqueño.