CHARLAS CON UN MAESTRO SAMMASSATI
Por: Gongpa Rabsel Rinpoché
Lama Sammasati para Latinoamérica
AMA Y HAZ
LO QUE DESEES (1)
Hoy hacemos la
primera entrega del tercer capítulo, del libro inédito Charlas con
un Maestro Sammasati, denominado Ama y haz lo que desees.
El maestro explica a su adepto en los versículos del 1 al 10 de este
capítulo, preguntas como: ¿Qué papel juega el maestro en el plan de
Dios? ¿Cuál es el plan de Dios? ¿Todo vale?, entre otras
interesantes preguntas.
Comencemos entonces:
1. Adepto: Maestro, yo tengo un interrogante que deseo me aclares
¿Qué papel juegas tú en el plan de Dios?
2. El Maestro: Apreciado y querido adepto ¿Qué papel juego yo? Yo te
amaré como nunca nadie lo haya hecho, porque tengo la capacidad de
hacerlo, ya que me tiene sin cuidado si mi amor o mi expresión
encajan con algún plan ilusorio y divino. Y dime ¿Por qué piensas
que Dios tiene un plan?
3. Adepto: Yo creo, con base en mi formación académica y religiosa,
que debe haber una razón, para que las cosas sean como son.
4. El Maestro: Recordemos que Dios lo es todo, La Mente Universal,
lo es todo en potencia.
El carece de un plan, su único objetivo es SER. Para que, de esta
manera, a todos los seres les sea posible ejercer su libre albedrío
y puedan expresar la vida que la Fuente Universal es. Si esta Fuente
Universal, lo que tú llamas Dios y la física cuántica denomina El
Campo Unificado, tuviera un plan, tu no podrías ejercer tu libre
albedrío, lo cual impediría que tu manifestarás a Dios dentro de ti.
Tu originalidad estaría condicionada, tu evolución espiritual se
estancaría.
5. Adepto: Maestro, explícame por favor, ¿por qué es importante que
Dios, no tenga un plan definido?
6. Maestro: ¿Por qué es esto importante? Cuando entiendes que la
vida simplemente es, eso te permite la libertad y el poder de crear
tu vida al máximo de tu capacidad. Y puedes estar seguro de que sin
importar lo que hagas en el próximo momento, vas a estar vibrando
con la totalidad de la vida, y continuarás haciéndolo en el próximo
momento, y en el próximo, y en todos los que vendrán después. Deseo
que entiendas que no existe un plan para la vida, sólo existe la
acción de Ser. Estar en un estado de Ser es la expresión más
grandiosa que existe…Ser. Lo que importa, apreciado adepto, es que
tú eres. Eso es todo lo que importa.
7. Adepto; Lo que parece que estás diciendo es que no hay una manera
en particular de vivir; que tú puedes ser y hacer todo lo que
quieras; que todo vale.
8. El Maestro: Adepto, magnifica expresión y más claro no lo podría
definir yo. Ciertamente tú puedes vivir tu vida como tu quieras, y
en realidad lo hace así no seas consciente de ellos. Por lo tanto tú
no eres víctima, eres un cocreador de tu mundo de tu vida, lo que
pasa es que aún no has tomado consciencia de ello. Ese es el amor
del Padre por ti.
9. Adepto: ¿Cuál es entonces el propósito de la vida o nuestra vida
no tiene propósito?
10. El Maestro: El propósito de la vida, es expresar sobre la
plataforma de la vida cualquier pensamiento que habite dentro de tu
ser. Y cualquiera sea la expresión a la que eso te lleve, siempre
tienes la opción de cambiar en cualquier momento que desees. El
propósito de la vida es ser parte de ella, ser su creador,
iluminarla. No hay otro destino, sino vivir y permitirte ser
cualquier cosa que desees, mientras la vida se despliega dentro de
ti, momento a momento. Y saber que, cumpliendo ese propósito, posees
la libertad ilimitada para convertirte, hacer y ser cualquier cosa
que desees.
En el siguiente artículo continuamos con la segunda entrega de este
tercer capítulo. No te lo pierdas.
LA HUELLA DEL PACTO AGRARIO HISTÓRICO PARA COLOMBIA PARTE 1
Por: Ivan
Pulido
La histórica
reforma agraria prometida por el presidente Gustavo Petro, es su
premisa estratégica alternativa de solución al desplazamiento
forzado de campesinos, violencia en el campo, pobreza, narcotráfico,
ocio por la improductividad y cumplimiento al acuerdo de paz entre
las FARC y Estado de 2.016. Su meta, la entrega de tres millones de
hectáreas a familias sin tierras y formalización de predios de siete
millones de hectáreas a comunidades campesinas, indígenas y
afrodescendientes, en cumplimiento de reconocimiento a los justos derechos
territoriales, de educación,
salud, laboral
y su correspondencia a convertirlas en tierras productivas para
beneficio propio y el de sus correspondientes familias.
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Tierras
que una vez compradas por el Estado, harán parte del inventario del Fondo
Nacional de Tierras, en tránsito a entrega gratuita para las comunidades
campesinas, indígenas y afrodescendientes, en cumplimiento a la democratización
de tierras fértiles improductivas, transferidas en compromiso a su productividad
y comercialización, apoyadas por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural
en la infraestructura que se requiera para el montaje sostenible, competitivo.
Los precios de compra, los que
determine el Instituto Geográfico Agustín Codazzi y los pagos comprometidos en
bonos de deuda pública u otras modalidades determinadas, proceso fielmente
acompañado y verificado por la ONU en Colombia y el Banco Mundial.
Ante la importancia de no acceder a errores del pasado en Colombia ocurridos por
la desarticulación entre la planeación y el proceso de desarrollo productivo de
los proyectos de reforma emprendidos, relevante acompañar durante todo el
desarrollo anexo a las tierras por repartir, los programas integrales de
educación, mercadeo, comercialización, asistencia técnica, financiación,
rentabilidad social, económica y literales acciones de infraestructura en
transporte, asociatividad regional, competitividad, seguridad y desarrollo
agroindustrial, que permitan superar la agricultura de subsistencia tradicional,
por la de competitividad asociada a cadenas de valor.
Por su parte, la ganadería
extensiva que siempre ha estado en Colombia en el ojo del huracán del conflicto,
que adquirió ante el acuerdo logrado, el oxígeno requerido para triplicar la
población bovina a 60 millones de cabezas, distribuida en veinte millones de
hectáreas, tras el macro intento de trasladar diecinueve millones de hectáreas
fértiles anteriormente en ganadería extensiva, a una productividad agrícola y
agroindustrial desarrollista.
Montaje, que requerirá de la coordinación del ICA, gremios ganaderos y otras
organizaciones, para prestación de los servicios de asistencia técnica,
transferencia de tecnología y extensión agropecuaria, en apoyo al proceso de
implementación de producción de carne y leche sostenible, priorizados en
sistemas silvopastoriles y cuidado del medio ambiente.
Muy importante para manejo del
proyecto, tener en cuenta la realidad migratoria de los campesinos a las
ciudades, por varias décadas ocurrida a causa de persecuciones políticas o
violencia, que registran más de 700.000 hogares expulsados de 1.115 municipios;
y desplazamiento forzado de cerca de 10 millones de personas, razones que
invitan a pensar en su difícil reintegro a los lugares de origen, por
encontrarse adaptados a condiciones diferentes de empleo en centros urbanos.
Situación que por la cual diferentes políticos, junto con algunos lideres
gremiales, por fatuto desconocimiento, se atreven a asegurarle al ciudadano
común de un campo lleno de trabajadores agrícolas esperando soluciones, cuando
la realidad que se vive es la carencia total de mano de obra, no hay quien ayude
a empalmar el azadón, factor verdaderamente traumático para la producción
agropecuaria, que ha variado hacia otros oficios diferentes en las ciudades, y
pretender su regreso al campo, es tarea titánica imposible, así sea igualmente
remunerado; como datos de información al respecto, la edad de los campesinos
colombianos oscila entre los 41 y 64 años; hay departamentos en que la edad
promedio supera los 57 años, situaciones que magnifican el problema de
pronosticar, el no tener quien siembre comida en Colombia en los próximos diez
años.
Los estudios revelan además, que el total de la juventud entre 14 y 18 años,
ascendió a 12 millones en Colombia, de esta cifra el 22% son jóvenes rurales que
en su mayoría no encuentran oportunidades en el campo para desarrollarse y
crecer, razón que por lógica les obliga a su movimiento a las ciudades, por no
estar dispuestos a repetir la historia de sus padres, en terminar sin una
pensión y viendo como los intermediarios se llevan con sus bultos las utilidades
que nunca llegaron.
Pero si esperando el país
entero, empiece a construir políticas agrarias que impliquen inversiones
billonarias anuales jamás presupuestadas, que dirijan el sector hacia la
industrialización de la producción agrícola, que la convierta en esa despensa
alimentaria mundial, por nunca haber establecido por parte de los gobiernos
pasados los planes concretos de desarrollo rural requeridos para la mejora de su
calidad de vida, situación que volverá imposible esa decisión de los jóvenes al
arraigo a sus orígenes.
De continuar esa tendencia, las fincas se convertirán en zonas de turismo,
mientras
observamos que la papa, maíz, arroz y hasta el tomate se importe del Ecuador,
Holanda o Estados Unidos. Y todos esos programas encaminados de buena fe por el
gobierno, basados en la reforma agraria, chocaran con la talanquera de la
escasez de agricultores y mano de obra, como principal obstáculo a solucionar.
Que en el caso de los tres
millones de hectáreas a repartir entre el campesinado, para el desarrollo de su
productividad, el óbice de su desesperación será el requerimiento de por lo
menos 1 millón de nuevos trabajadores, ¿de dónde se sacarán? Para igual análisis
el informarle al nuevo gobierno, que por el momento no es esencial la
importación de más doctores del ramo agrario, para la implementación de los
proyectos productivos, acá lo que necesitamos es desengavetar de los escritorios
de Agrosavia todos los trabajos científicos y hacerlos conocer a partir de un
programa serio de extensión rural que toque todos los rincones del país para
soñar con la tecnología agricultura tropical de punta.
Entre los elementos a tener en cuenta, para viabilidad de la propuesta de
reforma agraria, una campaña extensiva a la nueva juventud campesina a una
educación que integre todos los espacios rurales colombianos desde la niñez,
basadas en emprendimiento hacia la agroindustria, fomento a la asociatividad en
cooperativas, que incentiven el arraigo al campo, conjugadas con el
correspondiente
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liderazgo gubernamental que
integre las diferentes juntas de acción comunal, hacia el cumplimiento de las
metas de productividad a presente y corto futuro a desarrollar.
Se considera totalmente ideal
la alianza entre Gobierno, Sena y buena parte de Universidades del País, para
conformar un contingente de capacitadores que en progresión geométrica,
promuevan educación escolar calificada en tecnologías agrarias y
agroindustriales a las organizaciones campesinas hacia el inicio de
emprendimiento y formación de futuros dirigentes de sus mismas comunidades, que
posteriormente proyecten asociaciones productivas y/o cooperativas campesinas,
productivamente organizadas para éxito de su competitividad.
La educación rural, puede
emprender una contribución sustancial al desarrollo de la humanidad y cuidado
del medio ambiente en aspectos como los de seguridad alimentaria,
agua, energía, consumo y producción responsable, cambio climático, océanos,
ecosistemas, diversidad biológica, paz, justicia y reducción de la inequidad
rural y urbana.
La educación para el
desarrollo sostenible contribuir a analizar el impacto ambiental de sus
decisiones cotidianas respecto a medios de transporte, uso del agua y energía,
alimentos qué consumen, o qué productos usar o adquirir.
La necesidad de que se exija
el concurso activo del empresariado privado, e institucionalidad de entidades
como el ICA con presencia en todos los territorios para promover nuevamente el
desarrollo rural al pequeño y mediano productor y un sector financiero estatal
de fomento, que les apoye en la inversión, tipo Caja de Crédito Agrario
modernizada en principios de tecnología sustentable y desarrollo rural que haga
imagen presencial en todos los rincones de la producción.
ASOCIACIÓN DE INGENIEROS
AGRÓNOMOS EGRESADOS UT AMANTES DEL CAMPO POR. - I.A. IVAN ROBERTO PULIDO
GONZÁLEZ
Debemos de ponerle el ojo a las regalías
Por: Escritor@pereira.com
En medio de una situación fiscal bastante complicada, que se evidencia no solo
en la drástica reforma tributaria que se está tramitando sino en los nubarrones
de riesgo recesivo que asoman en todo el mundo, el Estado colombiano planea
movilizar entre 2023 y 2024 más de 31,3 billones de pesos a través del Sistema
Nacional de Regalías (SNR).
Se trata, sin duda alguna, del presupuesto más alto de la historia y, por ende,
ya desde
distintos sectores políticos, económicos, sociales, regionales, gremiales e
institucionales se han prendido las alarmas en torno a cuáles serán los
mecanismos nuevos que la Nación aplicará para evitar que una parte de ese
billonario monto termine siendo botín de las redes de corrupción, los carteles
de la contratación, el desgreño administrativo y la ineficiencia de los
contratistas.
De hecho, luego de que el Ministerio de Hacienda presentara a comienzos de este
mes al Congreso el respectivo proyecto de ley para aprobar ese presupuesto
bienal, ha venido creciendo un debate en torno a si no es necesario proceder a
reformas legales e incluso constitucionales para fortalecer el esquema
administrativo y de vigilancia preventiva de estos dineros, que deben estar
dirigidos a inversión social, educación, salud, infraestructura, ciencia y
tecnología, y ambiente, así como para focalizarse en los municipios más
afectados por el conflicto armado y la pobreza.
Las alarmas tempraneras no son gratuitas teniendo en cuenta tres elementos muy
puntuales. De un lado, que, pese a todos los ajustes para garantizar la
transparencia en la asignación y ejecución de estos recursos, las anomalías
continúan presentándose. Prueba de ello es el más reciente informe de la
Contraloría, según el cual desde el segundo semestre de 2018 hasta junio pasado
hubo 1.578 hallazgos con incidencia fiscal, por un valor total superior a los 3
billones de pesos.
La Procuraduría también ha alertado sobre múltiples casos de contratos con
ejecución
deficiente, ‘elefantes blancos’, cuantiosos anticipos en riesgo y grandes sumas
congeladas en el sistema financiero. A su turno, no pocas veedurías ciudadanas
denuncian que hay mafias enquistadas en muchas gobernaciones y alcaldías que
esquilman estos billonarios presupuestos.
Por otra parte, para nadie es un secreto que el país está empezando a entrar en
modo campaña para las elecciones regionales y locales de octubre de 2023, lo que
aumenta el riesgo de que estos dineros o la asignación de los mismos a
determinados proyectos, obras y programas terminen siendo direccionados por
maniobras politiqueras en departamentos y municipios.
A ello se suma que, pese a las pesquisas que realizan los entes de control
fiscal, disciplinario y penal alrededor de las denuncias sobre presuntas graves
irregularidades en los OCAD-Paz en el gobierno anterior, sobre todo en la
inversión de altos presupuestos en los 170 municipios
incluidos en los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), todavía
no hay claridad en torno a si hubo pérdida de dineros oficiales y quiénes serían
los responsables.
Visto todo lo anterior, es entendible que se esté urgiendo que se activen más
mecanismos para vigilar el uso de estos recursos. Es claro que hay más
herramientas de inteligencia artificial disponibles, así como marcos de acción
que permiten sobre todo a la Contraloría y la Procuraduría– realizar un
monitoreo en tiempo real y con ello poder activar correctivos sobre la marcha en
las obras y proyectos. Aun así, no cesan las irregularidades y la pérdida de
recursos. |