CHARLAS CON UN MAESTRO SAMMASATI

Por: Gongpa Rabsel Rinpoché
Lama Sammasati para Latinoamérica

El poder de la virtud

En nuestro articulo de hoy, vamos a tratar un tema muy interesante: El poder de la Virtud, esta enseñanza de Budha, está contenida en los Upadeshas 7 y 8 del Dhammapada versión Sammasati. Es una enseñanza que no invita a seguir una vida ética y sin excesos. Estos Upadeshas dicen los siguiente:

Aquellos que sólo buscan placeres sin armonía en su alma, sin consideración por su bienestar, son perezosos, carentes de fuerza de virtud y movidos por tentaciones triviales, son como un árbol débil que es sacudido por el viento. Mientras que aquellos que no buscan placeres excesivos y tienen armonía en su ser, que comen y ayunan con moderación y tienen fe, fortaleza en la virtud y no son movidos por tentaciones, son como una gran roca inmóvil ante el viento.

Comentario: Los upadeshas 7 y 8 del Dhammapada se centran en el poder de la virtud y nos enseñan la importancia de cultivar nuestras virtudes para vivir una vida armoniosa y libre de sufrimiento.

Según el Budha, aquellos que buscan placeres sin consideración por su bienestar son perezosos y carecen de fuerza de virtud. Este tipo de personas son como un árbol débil que es sacudido por el viento. Es decir, son vulnerables y frágiles, ya que no tienen una base sólida de virtud en la que apoyarse. En cambio, aquellos que cultivan la armonía en su alma y no buscan placeres excesivos son como una gran roca inmóvil ante el viento. Estas personas tienen fortaleza en la virtud, y no son movidas por tentaciones triviales.

Budha nos enseña que el poder de la virtud es fundamental para vivir una vida plena y satisfactoria. La virtud nos permite cultivar la armonía en nuestro ser, así como la fortaleza y la estabilidad emocional. La virtud también nos ayuda a vivir de manera ética y responsable, lo que nos permite mantener relaciones saludables y satisfactorias con los demás. En resumen, la virtud es un ingrediente esencial en el camino hacia la felicidad y la liberación del sufrimiento.

Cultivar el poder de la virtud es beneficioso para nosotros en muchos aspectos. Al practicar la virtud, cultivamos hábitos positivos que nos ayudan a lidiar con el estrés y la ansiedad en nuestra vida diaria. También nos permite desarrollar una mentalidad positiva que nos ayuda a enfrentar los desafíos de la vida con calma y serenidad. Además, la virtud nos ayuda a mantener relaciones saludables y satisfactorias con los demás, lo que nos permite disfrutar de una vida más plena y satisfactoria en general.

Para aplicar el poder de la virtud en nuestras vidas diarias, necesitamos practicar la observación y la reflexión sobre nuestra propia conducta. Debemos ser conscientes de nuestras acciones y palabras, y reflexionar sobre cómo pueden afectar a los demás. Debemos intentar cultivar las virtudes que consideramos más importantes, como la paciencia, la compasión, la humildad y la fortaleza, y tratar de evitar los vicios y la negatividad.

Además de la observación y la reflexión, es importante cultivar hábitos que nos ayuden a fortalecer nuestras virtudes en nuestras vidas diarias. Por ejemplo, podemos practicar la meditación para cultivar la atención plena y la calma mental, lo que nos permite responder a las situaciones de manera reflexiva y meditada en lugar de reaccionar impulsivamente. También podemos intentar ser más respetuosos y amables con los demás en nuestras interacciones diarias, lo que nos permite cultivar la compasión y la empatía.

El poder de la virtud es importante para Budha porque cree que es la base de una vida armoniosa y libre de sufrimiento. Al cultivar la virtud, nos acercamos a la comprensión profunda de la verdadera naturaleza de las cosas, lo que nos permite liberarnos del sufrimiento y alcanzar la iluminación. Además, Budha enseñó que la virtud es importante para vivir de manera ética y responsable, lo que nos permite mantener relaciones saludables y satisfactorias con los demás.

En conclusión, el poder de la virtud es un ingrediente esencial en el camino hacia la felicidad y la liberación del sufrimiento. Cultivar las virtudes nos permite vivir una vida más armoniosa y satisfactoria, y nos permite acercarnos a la comprensión profunda de la verdadera naturaleza de las cosas. Para aplicar el poder de la virtud en nuestras vidas diarias, debemos practicar la observación y la reflexión, cultivar hábitos que fortalezcan nuestras virtudes y buscar la guía de los maestros budistas para ayudarnos en nuestro camino hacia la iluminación.

Espero que este artículo haya sido de utilidad para ti. Si tienes alguna duda o comentario, no dudes en ponerte en contacto conmigo al correo electrónico gongparabsel@gmail.com o al WhatsApp +57 314 623 83 08. Si deseas hacernos una donación, para apoyar esta causa, hazlo a

las FARC.

Solo así garantizan su silencio, sobre la realidad de los hechos.

¡Otra mentira!

Y finalmente, la muerte del Coronel Dávila, reportada a los pocos minutos, sin dictamen forense previo, por el ministro Velázquez, como un suicidio, tiene un mar de inconsistencias y errores, que muestran más a las claras, que pudo ser asesinado para que no cantara ante la Fiscalía, como era su intención.

Han aparecido un montón de evidencias que muestran al Coronel Dávila, acosado e intimidado, por haber sido El quien dirigió las interceptaciones telefónicas, pero no un suicida.

El tema da solo para un artículo, pero es evidente que el único beneficiario de su muerte es el Gobierno.

Con la desaparición de Dávila, desaparecen todos los detalles y pruebas de un escándalo que tiene a Petro contra las cuerdas.

El suicidio no responde a un mar de interrogantes que no lo justifican.

Los medios y las redes sociales están hoy inundados de todos estos cuestionamientos a la hipótesis del suicidio del Coronel Dávila.

Pero parece mejor mantener esa mentira viva, que las pruebas de ese escándalo Benedetti, hubieran salido a la o luz pública.

¡Sin las mentiras, no saben gobernar!

Aunque se van en el corazón siempre se quedarán

Por: Guillermo Navarrete Hernández

“Caminante son tus huellas el camino y nada más. Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace camino y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar”.

Este fragmento de la canción del gran poeta y cantautor Joan Manual Serrat, trae a recordación que el poblamiento del planeta y la formación de naciones deviene precisamente de la migración en búsqueda de oportunidades o de la natural actitud de conquista propia del ser humano. Pero también, la metáfora de avanzar con la mirada puesta en los objetivos que por la gracia de los sueños se urden en la mente.

Las personas de nuestra generación -la de la guayaba, según Andrés López-, se crio en un ambiente de variadas restricciones debido, entre otras cosas, a que la tecnología no había surtido los avances vertiginosos de hoy, los cuales cambian las dinámicas sociales, culturales y económicas de los individuos con la sociedad global. En aquel contexto, tomar un avión con destino a un país diferente al originario era una especie de misterio inalcanzable para muchos y digno de admiración hacia quienes osaban dar el paso. En el consciente aún se alojan las remembranzas de personas cercanas que para mejorar su condición de vida abordaron por medio de una vinculación laboral en una empresa naviera, barcos de carga o de turismo. De hecho, para varios de ellos fue un instrumento de financiación para sus carreras profesionales o de obtener un incremento en el patrimonio.

La migración interna también es una práctica común. Por ejemplo, los procesos de colonización por parte de familias antioqueñas, boyacenses y cundinamarqueses en las postrimerías del siglo XIX y comienzos de la centuria de los XX, dieron lugar a la extensión de cultivos como el café, la papa, la yuca y frutales, así como de la actividad ganadera y el desarrollo vial, pero también de violencia, lamentablemente.

Ahora la movilidad, incluso con fines turísticos es mucho más dinámica y eficiente. La tecnología, la competencia entre las empresas de transporte en sus diversas modalidades y la flexibilización de medidas para el tránsito de extranjeros por parte de los diferentes países, contribuyen en dicho proceso.

En uno u otro caso, la partida de seres queridos, se traduce en tristeza y lágrimas porque y aunque se vayan en el corazón siempre se quedarán. No obstante, y a diferencia con el viaje definitivo al que inexorablemente todos debemos acudir, el sentimiento que se quedó en la caja de Pandora, considera algún día en la cercanía física volverlos a tener, a la vez que deseos de buenos vientos y buena mar en los nuevos horizontes que determinaron realizar. Mientras, la video llamada, las fotos y los continuos mensajes que los medios electrónicos dan la oportunidad, son el aliciente que de forma permanente podemos de ellos saber.

Nota: es importante no olvidar a las personas que por sus condiciones de pobreza se convierten en víctimas de los denominados coyotes, al terminar abandonados a su suerte en los desiertos, murallas, ríos y alambradas de los sitios de frontera entre países.