Pereira, Colombia - Edición:13.096-676

Fecha: Jueves-22-06-2023

 

COLUMNISTAS

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CHARLAS CON UN MAESTRO SAMMASATI

 

 

Por: Gongpa Rabsel Rinpoché
Lama Sammasati para Latinoamérica

 

El mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih:
Significado y Beneficios de su Práctica

 

El budismo es una de las religiones más antiguas y respetadas del mundo, y ha sido influenciado por muchas culturas y tradiciones diferentes. Una de las prácticas más populares dentro del budismo es la recitación de mantras, que se cree que tienen poderes espirituales y mentales profundos.


Uno de los mantras más populares en la tradición budista es el mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih. Este mantra es conocido por su poder protector y se utiliza a menudo en las ceremonias y rituales budistas. En este artículo, exploraremos en detalle la pronunciación, etimología, origen, significado y beneficios de este poderoso mantra.

Pronunciación aproximada en español.

La pronunciación del mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih puede variar dependiendo de la tradición y la región. En general, se pronuncia como Om Ah Rah Pah Tsa no Dee

Etimología

El mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih proviene de la tradición budista tibetana y sánscrita. Cada una de las sílabas del mantra tiene un significado simbólico y espiritual profundo.

Origen

La recitación del mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih se origina en la tradición budista tibetana, y se cree que fue introducido por el gran maestro tibetano Padmasambhava. Padmasambhava es considerado uno de los fundadores del budismo tibetano y se cree que trajo la enseñanza del Vajrayana al Tíbet en el siglo VIII.

Siglo de su creación.

El mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih se ha utilizado durante siglos en la tradición budista tibetana. Aunque no se sabe exactamente cuándo se creó el mantra, se cree que ha sido utilizado por cientos de años como una práctica espiritual.
Escuelas que lo practican

El mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih se practica en la tradición budista tibetana y es utilizado por todas las escuelas de esta tradición, incluyendo el budismo tibetano, el Vajrayana y el budismo Mahayana.

Significado

El mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih se compone de siete sílabas, cada una con un significado espiritual profundo:

Om: esta sílaba representa la energía primordial del universo y se considera un símbolo de la unidad y la totalidad.

A Ra Pa: estas dos sílabas representan la energía protectora de la divinidad y se utilizan para purificar el karma negativo y proteger de las fuerzas negativas.

Ca Na: estas dos sílabas representan la energía de la sabiduría y se utilizan para desarrollar la comprensión y la iluminación.

Dhih: esta sílaba representa la energía de la meditación y se utiliza para fomentar la concentración y la mente serena.

En conjunto, el mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih se utiliza como una forma de protección y purificación espiritual. Se cree que la recitación del mantra puede ayudar a eliminar los obstáculos y los bloqueos emocionales, así como a aumentar la claridad mental y la intuición. También se cree que puede ayudar a mejorar la concentración y a aumentar la energía espiritual.

Para que sirve.

El mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih es ampliamente utilizado en la práctica del budismo tibetano y es considerado uno de los mantras más poderosos de la tradición tibetana. Se utiliza comúnmente en meditaciones y rituales para purificar la mente y el cuerpo, así como para proteger al practicante de influencias negativas y peligros espirituales.

La recitación del mantra también se utiliza a menudo como una forma de honrar y conectarse con las energías protectoras de los budas, bodhisattvas y deidades tibetanas. Algunas escuelas de budismo tibetano utilizan el mantra como parte de sus prácticas de iniciación y para otorgar bendiciones espirituales a los iniciados.

El mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih tiene un significado profundo y simbólico en el budismo tibetano. Cada una de las sílabas que componen el mantra tiene un significado específico y representa un aspecto de la iluminación o de la conciencia despierta.

Que beneficio trae su práctica.

Al repetir este mantra, quine lo practica, se beneficia de la siguiente manera:

Con la sílaba "Om" logra conectarse con la naturaleza esencial de la mente, mientras que con las sílabas "A Ra Pa" logra la

 

 

 

liberación de los apegos y la superación del sufrimiento. La repetición de la sílaba "Ca" alcanza la sabiduría de la vacuidad, y con la sílaba "Na"  logra entender la sabiduría de la naturaleza interdependiente de todas las cosas. Finalmente, con la sílaba "Dhih" se logra la estabilidad y la concentración mental.

 

En resumen, el mantra Om A Ra Pa Ca Na Dhih es una poderosa herramienta para la purificación y la protección espiritual. Se utiliza comúnmente en la práctica del budismo tibetano como una forma de conectarse con las energías protectoras de los budas, bodhisattvas y deidades tibetanas, y para otorgar bendiciones espirituales a los iniciados. La recitación del mantra puede ayudar a eliminar los obstáculos y los bloqueos emocionales, aumentar la claridad mental y la intuición, mejorar la concentración y aumentar la energía espiritual.

 

Democrateria, populismo y demagogia

 

 

Por: Guillermo Navarrete Hernández

 

Según el artículo primero de la Ley 130 de 1994, “Todos los colombianos tienen derecho a constituir partidos y movimientos políticos, a organizarlos y a desarrollarlos, a afiliarse y retirarse de ellos libremente y a difundir sus ideas y programas”. En tal sentido, el Consejo Nacional Electoral, es la autoridad facultada para otorgar personería jurídica a quienes deseen organizarse bajo su propia ideología y directrices para participar en los procesos electorales en el país, previo el lleno de los requisitos exigidos en la citada norma.

Colombia, un país que paso de un bipartidismo excluyente generador de violencia y odio, represor de otras expresiones democráticas e instrumentalizador -por esas vías también-, del aparato estatal para satisfacer sus mezquinos intereses, a uno en el que ahora posee 33 partidos políticos con personería jurídica que tienen la facultad para otorgar avales a aspirantes a corporaciones y cargos de elección popular, esto es alcaldes y gobernadores, por una parte, y Asambleas departamentales, Concejos municipales y Juntas Administradoras Locales, por la otra, para aquellos municipios que adoptaron dividir su territorio en comunas en su área urbana y corregimientos en el sector rural, conforme lo señala el capítulo VIII de la Ley 136 de 1994.

Con algunas excepciones, los directivos de tales colectividades tienen un comportamiento similar para el otorgamiento de avales a quienes aspiran a participar legitimante en el proceso electoral del próximo 29 de octubre. Los estatutos suelen ser un copie y pegue para legalizar su conformación legal, un saludo a la bandera de las propias reglas impuestas a través de ellos, sin ideología política alguna y un mecanismo de tráfico de influencias al que deben someterse las personas que acuden para obtener el ansiado pasaporte seudodemocrático.

A lo anterior se suma la cooptación de unos partidos, denominados pequeños o recién creados, por otros, tal vez más poderosos y tradicionales, cuyos líderes saltan de aquí para allá con una sutileza y agilidad para, a través suyo, de familiares o amigos cercanos, manipular los destinos, tanto de las colectividades como de los destinos de los territorios con candidatos que se identifican con sus pareceres, con prevalencia de aquello que en el argot popular se distingue como “el que más saliva tiene más harina come”. En ese trasegar, se quedan a la vera del camino personas con capacidades para conducir con conocimientos sobre lo público, principios, transparencia y principios, sus alcaldías y gobernaciones.

La confusión de la que van a ser presa los electores, es otro de los ingredientes del plato fuerte de las elecciones, con convenientes coaliciones orientadas a asegurar la victoria, además de unos tarjetones plagados de logos y números, para el caso de asambleas, concejos y JAL, con el aplique de otro célebre adagio: “confunde y vencerás”. Todo en un contexto de democrateria, populismo y demagogia

Sin duda es urgente una reforma política que le garantice al sistema contar con partidos serios en términos de ideología política, económica y social, y con instrumentos democráticos de afiliación, debate, acceso a cargos directivos dentro de ellos, elecciones primarias obligatorias que se ejecuten todas en un mismo día para evitar intromisiones de los malabaristas politiqueros y certeras sanciones para la doble militancia. Por lo pronto, seguir soportando el desorden y guardar la esperanza de que al menos unos pocos partidos tengan el pundonor de allanar el camino que permita fortalecer la democracia local.

 

¿SOMOS MAYORÍA?
 

 


Por: Álvaro Ramírez González
alragonz@yahoo.es


Al que peor le está yendo en este caótico y errático gobierno, es al propio Gustavo Petro.

 

 

 

Caer del 74% de favorabilidad al 23% en 10 meses, es casi imposible.

Esa caída apenas la puede igualar Gabriel Boric, mandatario de Chile.

Este último perdió en menos de un año toda su capacidad de maniobra.

El gobierno chileno es un carro varado al cual ya no le suena ni el pito.

Se le cayó estruendosamente la nueva constitución de tipo soviético - Comunista que Boric quería instalar en Chile, en la cual desaparecía hasta el concepto de propiedad privada.

Se le cayó, igual por una dura diferencia, una Reforma Tributaria que Boric necesitaba para su macabro plan de gobierno.

 

Todos los llamados angustiosos que hace hoy Boric, a los partidos tradicionales para gobernar juntos, son recibidos con burla.

De hecho, José Antonio Kast del partido Republicano que fue derrotado por Boric, se perfila ya con una arrasadora fuerza como el nuevo mandatario de Chile.

El problema es que a Boric, le quedan aún 3 años de gobierno.

Las multitudinarias marchas de ayer 20 de junio, para protestar contra Petro y su caótico y corrompido mandato, coinciden con la hundida en el Congreso de su reforma laboral y de su proyecto de marihuana recreativa.

Ya los congresistas de casi todas las vertientes, no quieren siquiera acudir al recinto del Congreso.

Las reformas política y laboral del programa Petro, fracasaron en el parlamento, por malas, mal estructuradas, dañinas e indefendibles.

Las reformas a la Salud y a las pensiones transitan por el mismo camino del fracaso, por inconvenientes, comunistas y dañinas.

Apelan a modelos estatistas como el seguro social que no sólo acabó con la salud en Colombia, sino que se robó todo el ahorro pensional.

Y no hay ni uno solo de los responsables preso.

La economía colombiana sigue en caída, el entusiasmo empresarial está completamente muerto, la inflación arrasa con la clase media y lleva a la miseria a los pobres y el alza en la gasolina hará explotar este país.

Al tiempo que la extorsión y el secuestro se apoderaron de Colombia y tienen avasallados los campos y ciudades completas como Barranquilla y Soledad en el Atlántico.

Petro perdió toda su amplísima mayoría que tenía en el Congreso al iniciar su mandato en agosto del 2022, y también el apoyo popular.

La oposición inundó las calles y las plazas ayer 20 de junio.

Pero Petro ni siquiera ha completado el primer año de su mandato.

Petro debe estar reventado por dentro, porque su mandato ya no le trae ni una sola noticia buena.

Las masacres están disparadas y la guerra territorial entre los grupos narco terroristas es total.

El acuerdo firmado en la Habana con el ELN, es un fiasco, en el cual además de permitir la extorsión y el secuestro como mecanismos de financiación de ese grupo terrorista, reclama para ellos detener su actuar, unas sumas tan descomunales que no están en presupuesto nacional, ni en ninguna parte.

De verdad se le cerraron en apenas 10 meses todos los caminos a Gustavo Petro.

Y, para terminar, sus intervenciones en la Asamblea de la ONU, en la Universidad de Stanford, en el Palacio Real en Madrid y ahora en Alemania, lo dejan por el suelo.

Su imagen internacional es hoy deprimente.

Y como si le faltara algo a la sopa, el escándalo Benedetti- Laura Sarabia, con maletas de dinero a bordo, la muerte de un Coronel, y la financiación mafiosa de $ 15.000 millones para la campaña Petro, deja todo por el suelo.

Somos pues una clara y contundente mayoría quienes nos oponemos a ese mandato errático y fallido.

Se presagia una durísima derrota a la izquierda en octubre y en ciudades como Bogotá, Medellín, Barranquilla y Cali.

¡Catastrófico para Petro lo que le espera!

 

 

 

  

 

 

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