“La contemporaneidad de lo
ancestral”, el plano sensorial de Olga de Amaral
La hojilla de oro es el elemento protagónico que les concede a las
piezas cierto carácter de “objetos de poder”
En la galería Duque Arango de Medellín se encuentra “La
contemporaneidad de lo ancestral”, una muestra de Olga de Amaral que
da cuenta de las diferentes etapas de la reconocida artista, quien a
sus 92 años le sigue apostando al arte colombiano.
La exposición está compuesta por 24 obras de diversos formatos.
Entre las piezas expuestas figura "Nébula", que es la única con
papel japonés como soporte y donde los metales preciosos brillan por
su ausencia, una obra evidentemente delicada y, por lo mismo,
testimonio del refinamiento involucrado en la concepción y ejecución
de su trabajo.
En otra obra, el color azul sugiere una grieta
|
|
en una superficie virgen, una hendidura que recuerda los
“rompimientos de gloria” que figuran con frecuencia en el arte clásico para,
mediante una ficción de perspectiva, representar el plano espiritual sobre el
plano terrenal. En la obra de Amaral se trata más bien del plano sensorial y del
plano espiritual,
siendo la superficie total el plano
sensorial que se extiende invitando a examinarlo minuciosamente, mientras que la
grieta sería el plano espiritual por donde escapan nuestros pensamientos.
Otra obra incluida, "Umbra", o sea, "Sombra", hace referencia a la penumbra que,
en relación con las artes plásticas, enriquece las cualidades de la forma y el
espacio al tiempo que realza el volumen y las texturas.
De acuerdo con el curador de la muestra, Eduardo Serrano, "en la mayoría de las
obras la hojilla de oro es el elemento protagónico en la superficie y les
concede a las piezas cierto carácter de 'objetos de poder', dignos de ser
atesorados, pero no sólo por el valor monetario del metal que de todas maneras
brilla seductoramente, sino por el destino que ha tomado en las manos de Olga de
Amaral de convertirse en arte, en conducto para expresar sensiblemente ideas y
pensamientos relativos al mundo y a la vida, de responder sensualmente a
inquietudes intelectuales que sin duda han alimentado sus reflexiones
creativas”.
Del mismo modo, lo más descriptivo de su producción es el título "Alquimia".
“Los alquimistas buscaban transmutar la materia y eso es precisamente lo que
hace Olga de Amaral: transmuta materiales como el oro en arte, en algo más
valioso que el oro, porque es producto del ingenio humano”, refiere Serrano.
“Cada vez que tengo la fortuna de apreciar las obras de Olga de Amaral, las veo
distintas, como si hubieran cambiado
|
|
subrepticiamente, ahora
las veo como un arte cuya validez se inicia en la prehistoria, pero que a partir
de materiales fibrosos la artista se ha adentrado en los senderos misteriosos y
enriquecedores del arte contemporáneo, haciendo, a través de su obra, claros
pronunciamientos acerca de la identidad y la memoria”, añade.
Olga de Amaral
Una importante figura en el desarrollo de la abstracción de la posguerra en
Latinoamérica. Sus obras "sin bastidor" usan materiales poco convencionales y
adquieren mayor importancia histórica con el paso del tiempo. Esta reconocida
artista textil cuya técnica incorporan fibras, pintura, yeso y metales preciosos
transformando el textil de dos dimensiones a objetos tridimensionales y por ende
creando obras que van más allá de la clasificación. El uso del oro por Amaral,
inspirado en las historias entrelazadas de la cultura prehispánica con el arte
colonial, dona a su trabajo una presencia a la vez sensual y ancestral.
Su obra está fuertemente influenciada por su exploración de la cultura
colombiana y su propia identidad. La arquitectura, las matemáticas, el paisaje y
la diversidad sociocultural de Colombia aparecen en las formas que logra con el
uso de las fibras textiles y los metales.
Amaral ha exhibido en instituciones importantes como el Museo de Arte Moderno de
New York, el Museo de Arte Moderno de París y el Museo de Arte Moderno de Kioto,
Japón.
Su trabajo es parte de colecciones permanentes de grandes instituciones, como:
el Instituto de Arte de Chicago, Illinois; el Metropolitan Museum of Art New
York y The Renwick Gallery de la Galería Nacional, Washington, D.C.; Museo de
Arte Moderno de la Ciudad de París, el Museo de Arte Moderno de Kioto, la
colección de Arte del Banco de la República, entre otros. |