DE AQUÍ Y DE ALLÁ

Por: Otoniel Parra Arias

CADA DÍA SE AGRAVA MÁS LA SITUACIÓN EN VENEZUELA

No llama mucho al optimismo la forma como concluye esta semana en relación con la crisis venezolana, si nos atenemos a los informes internacionales sobre la débil actitud de los gobiernos regionales y la fanfarrona y matonesca actitud de un dictador que al parecer sigue incólume en cuanto a su entorno militar y civil a pesar de la pruebas que existen respecto a sus actividades en contra de la vida y los bienes de los ciudadanos venezolanos.

En lo internacional el pronunciamiento de la Casa Blanca dándole el visto bueno al candidato opositor, señor González es importante pero hasta el momento no pasa de ser un enunciado enjuiciatorio sin mayores señas de posteriores acciones contra el régimen que vayan poniéndolo de verdad contra la pared.

Y ni que hablar del presidente de Colombia, Gustavo Petro, quien ha pasado del silencio cómplice a las declaraciones en la red X, que mezclan solo buenos deseos y no enfrenta como se debe lo que está sucediendo, lo contrario a la forma como defendió hace unos meses en su país a los jóvenes en las protestas públicas junto a la tristemente famosa primera línea, que siempre contó con su más enérgico apoyo para denunciar lo que estaba ocurriendo con ellos.

En el presente caso, Petro aún a sabiendas de hechos similares en Venezuela se ha limitado a recomendar mesura y discreción a los protestantes para evitar problemas mayores, algo así como la recomendación de un buen padre a un hijo para que no se meta en líos callejeros.

Pero lo más increíble es el pronunciamiento de presidente junto a López Obrador el mexicano, un maromero de la palabra que elude cualquier situación que vaya a comprometerlo en reconocer errores de la izquierda.

Ayer sábado veíamos en la revista Semana una noticia en la cual el alto funcionario de Estados Unidos Antony Blinken recomendaba a María Corina Machado, la valiente líder venezolana, extremar medidas para salvar su integridad personal. Por algo será esta recomendación!

El sábado también se presentó la manifestación multitudinaria de la oposición, en el vecino país, replicada en varios lugares del mundo para refrendar su reclamo para que no les sea birlada la presidencia ganada en buena ley.

Simultáneamente el dictador Maduro arrecia el secuestro y detención a ciudadanos del común para llevarlos a cárceles sin

Fue mi leal y esforzado compañero en esa cruzada, mi gran amigo, Don Juan Hurtado Cano.

Con él, montamos un partido vigoroso y ordenado, y voluntariamente nos fuimos.

Después de algunos años de existencia, el partido se autodestruyó.

Perdió todo su poder, sus curules de Senado y Cámara y casi desapareció de la Asamblea Departamental y de los Concejos municipales de Risaralda.

Desapareció del panorama político del Departamento.

Aun teniendo un presidente del CD como Iván Duque, un Senador como Álvaro Uribe y dos Senadores como Alejandro Corrales y María del Rosario Guerra, dama Sucreña, pero casada con pereirano, e hija por adopción de esta tierra, el CD de Risaralda sucumbió.

¿Cuál fue la razón?

Yo escribí tres columnas en los dos últimos años de presencia del CD, pronosticando con mucha preocupación y fuerza argumental, su inminente derrota.

Tantos errores no podían salir gratis.

Se derrotaron ellos mismos.

Primero vino la división.

Después y por muchos años un Comité Departamental arrogante, autista, inactivo, inocuo e inútil, que, a pesar de acumular derrotas, se negó siempre a renunciar.

Unos figurones que hacían la política en un restaurante, aplaudiéndose los unos a los otros.

Pero ninguno de ellos, salió a la calle, a las comunas, municipios o veredas a hacer la política.

Desconectados totalmente de líderes políticos locales.

Nunca conocieron a Pereira ni menos a Risaralda.

Posaban de aplicados políticos solo cuando venía el presidente Uribe.

Pero no hicieron nada por la política ni por el CD.

Por esa razón fueron borrados por los demás partidos políticos.

¡Y aún así no se han ido!

Conchudos.
¡Caraduras!

Pues bien, acaban de pasar las convenciones municipales y acaban también de sumarle una estrepitosa derrota más, a su ya larga colección de fracasos.

El Diputado Durgues Espinosa, único sobreviviente de todos esos años de errores, aislamiento, persecución y malos tratos, por ese Comité, y el Concejal Rodolfo Martínez, acaban de arrasarlos en las convenciones municipales.

De los 14 municipios de Risaralda, Durgues, Rodolfo y su equipo, que, si hacen la política en la calle, los barrieron físicamente en 13, incluido Pereira.

Ese resultado abre una luz de esperanza y renovación para un partido como el CD, que una vez fue el referente de la política en Risaralda y en manos de estos pésimos directivos, se acabó.

Impensable.

Y tampoco con esta última derrota que suena a masacre, se deciden a renunciar.

Menos mal en 60 días será la Convención Departamental del CD, y los van a sacar a todos.

¡A todos!

Un Comité que coleccionó errores y fracasos y no tuvo la vergüenza de renunciar.

Soy amigo de todos ellos en lo personal.

Pero en lo colectivo y político, son un total desastre y se van, sacados a sombrerazos por Durgues y el grupo de los ganadores.

Dejan el partido en ruinas.

Y los van a sacar a sombrerazos. De otro modo no se van.

La historia ya está escrita.
Pasarán en ella, como los sepultureros del Centro Democrático de Risaralda.

¡Qué pena!

Sobremesa 1

Este comité que va de salida, llegó al extremo de traer candidatos a la Gobernación de Risaralda y a la Alcaldía de Pereira, de otros partidos, para no tener que escoger los del CD, por una división interna.

¿Aberrante verdad?

¡Pues también fracasaron!

Sobremesa 2

Lo único bueno que dejó ese fracasado comité, fue a Gabriel Vallejo Chujfi, hoy director nacional del partido.

Sobremesa 3

Con Durgues, Rodolfo, Gabriel y muchas figuras nuevas, vamos a reconstruir y a vigorizar de nuevo al CD.

Sobremesa 4

Dije vamos.
¡A ayudar, no a posar!