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COLUMNISTAS

 

Pereira, Colombia - Edición: 13.360-940

Fecha: Martes 05-11-2024

 

MIGUEL URIBE TURBAY

Por: Álvaro Ramírez González
alragonz@yahoo.es

 

Recibí el pasado viernes la visita del Senador del CD, Miguel Uribe Turbay.

Asistió a varias reuniones políticas y visitó varios medios de comunicación en Pereira.

Pero reservó el fin del día para visitarme y tener una reunión menos apurada que terminó en la mitad de la noche.

Lo acompañó el exsenador, y fundador del CD, José Obdulio Gaviria.

 

Conocí a Miguel hace tres años en una Navidad que vino a visitarme y tuvimos un almuerzo juntos largo y muy amable.

Allí me contó todo sobre su persona, su trayectoria y sus aspiraciones.

Su abuelo el expresidente Julio César Turbay, ejercía la presidencia de la República, cuando yo era Alcalde de Perera por los años 1981 -82.

Con él tuve una buena amistad y en él, un gran maestro.

Miguel Uribe Turbay es hijo de Diana Turbay, que fue secuestrada y asesinada por Pablo Escobar.

La visita del viernes en compañía de José Obdulio, fue para contarme de su candidatura presidencial por el CD.

Miguel se someterá al mecanismo (consulta o encuesta), que determine el partido para escoger uno de los 5 candidatos, que son María Fernanda Cabal, Paloma Valencia, Paola Holguín, Andrés Guerra, y Miguel Uribe.

Es un abogado de la Universidad de Los Andes, bogotano de 38 años, casado y con dos maestrías, una en política pública de la Universidad de Los Andes y otra en administración pública de Harvard.

Un político con una hoja de vida totalmente transparente y una muy destacada trayectoria como Secretario de Gobierno de Bogotá al lado de Enrique Peñalosa y otra como el Senador más votado del CD.

Tuve una larga y aguda conversación con Miguel y José Obdulio, escudriñando las verdaderas posibilidades de su aspiración, en un panorama político con 45 candidatos a la presidencia de Colombia.

Me contó que ha preparado una plataforma política muy sólida y consistente que está fortaleciendo con sus giras por todo el territorio nacional.

Ha sido un férreo opositor del gobierno Petro y el responsable de que muchas de sus barrabasadas en el Congreso no hayan pasado.

Un político total como su abuelo Julio César Turbay, en una versión moderna y muy ágil para entender y exponer la política.

Miguel es un hombre muy amable, muy fácil de tratar, y además muy estudioso.


Eso le ha permitido tener una visión muy clara de lo que pasa en este país y lo que hay que hacer para enderezar su rumbo.

José Obdulio Gaviria es una biblia y tiene una memoria prodigiosa.

Además, una capacidad de entender la política tal, que ahora entiendo por qué ha sido siempre consejero permanente de Álvaro Uribe.

Miguel Uribe tiene claro que va a ser el candidato del CD y luego el presidente de la República.

Pero no es un soñador chiflado como tantos aspirantes hoy.

Es un estratega como su abuelo, que calcula cada paso, cada alianza y cada reunión con una clarísima medida de eficacia.

Está dispuesto como el que más a construir alianzas con los demás partidos y candidatos, siempre alrededor de apoyar al mejor y con más posibilidades.

Es una posición productiva, amable, abierta, pero con muchos riesgos.

Y Miguel está preparado para ese juego peligroso y también dispuesto a apoyar a quien lo supere.

¡Con la mayor tranquilidad!

Miguel Uribe es una de las cartas más fuertes en la apuesta por la presidencia de Colombia.

Primero porque el CD, ya con Uribe al comando, será de nuevo el partido más fuerte en esta contienda.

La izquierda y los verdes no solo están desacreditados con este gobierno, sino muy divididos.

¡Divisiones irreconciliables!

Uribe está reencauchado y dispuesto a dar la pelea metro a metro por recuperar este país.

Y Miguel además de juventud y sex- appeal político, tiene mucha academia y muy analizados los caminos y las estrategias para salir de este berenjenal.

Joven, ambicioso, disciplinado, madrugador, estudioso y como su abuelo, un imán político.

Inspira confianza y afecto.

Como les dije ya lo conocía e interactuamos por las redes.

Es mi lector.

 

 

 

Pero quede notificado y por eso les comparto esta noticia de que hay quien pueda salvarnos.

Como el Chapulín Colorado.

 

Buena suerte para Miguel y todos los buenos que se lanzan a salvar este país.

¡La mejor!

Sobremesa 1

Sin entrar en detalles, pero de fuente José Obdulio Gaviria, la gran noticia de que el Presidente Uribe, no irá a la cárcel.

Sobremesa 2

Consistente con esa noticia me dijo José Obdulio que “Uribe está como un roble “ y listo para enfrentar con los suyos el rescate del país!

Sobremesa 3

Tener a José Obdulio al lado, es tener un compendio incomparable de cultura, historia, análisis político y estrategia.

¡No conozco uno mejor!

 

DE AQUÍ Y DE ALLÁ

Por: Otoniel Parra Arias

 

“LA POLA” RENDÍA EL PARTE DE TRANQUILIDAD ANTE EL GOBERNADOR DE RISARALDA TODAS LAS MAÑANAS

 

Cuando las ciudades son pequeñas, aunque con aspiraciones de crecer algún día, les ocurren cambios como los de sus habitantes mortales cuando desembocan de una niñez de ensoñaciones hacia el campo minado de la adolescencia con sus cambios hormonales y sicológicos.

Me refiero a lo que conozco por haberlo vivido: a la Pereira de los años 60s, en nuestra época de niñez y juventud antes de que la pequeña población alargara pantalón para convertirse como se lamenta Luisito Rey en una de sus páginas musicales: “mi pueblo ya no es mi pueblo, es una ciudad cualquiera, con los edificios altos y con grandes carreteras”.

La ciudad no ocupaba un renglón muy encumbrado en las estadísticas de Planeación Nacional y si lo haría hacia finales del siglo llegando a ser la quinta ciudad del país; era entonces solo una parte demasiado humilde de un departamento llamado Caldas con su capital en la vecina Manizales.

Y tal como ocurría en sus alrededores y en la mayoría de pueblos de Colombia, por ser tan pequeña albergaba dentro de sus personajes populares fáciles de distinguir a la primera mirada, algunos muy especiales que seguramente muchos de aquellos tiempos a la mejor puedan recordar.

Me refiero a los loquitos u orates que deambulaban por las calles y plazas dando curso diario a sus delirios en expresiones a veces de enfado con tendencia peligrosa, pero la mayoría de las veces de gracia que motivaban la risa de los transeúntes por el deshilvanado muestrario de contradicciones que indudablemente llevaban a muchos que orgullosamente se autocalificaban como muy cuerdos a ingresar a la corte de sus seguidores, solo por el deseo malsano de gozarse de las impertinencias y dislates de aquellos desafortunados.

Entre estos desafinados de la vida recuerdo por ejemplo a “La Pola”, una señora de edad madura que algún día había despertado en el mundo casi onírico de otra vida con nuevo lenguaje y actitudes que otrora le habrían sacado los colores a ella misma. La pola en sus años que algunos llamarían dorados habría decidido cambiarlos merced a sus desarreglos mentales en una nueva vida en la cual ella era una militar de alto rango con la responsabilidad de velar por la seguridad de la ciudad en las 24 horas de los siete días de rigor.

Para ello se rebuscó los arreos propios de un personaje de tan cimbreantes campanillas que al salir a las calles y visitar oficinas oficiales y privadas causara respetuosa impresión y todo el poderío que emana de un alto dignatario de las fuerzas militares, algo muy alejado de un arlequín rey de burlas que sirviera de escarnio para la plebe.

De tal forma y por su educación y refinamiento quizás debido a una lejana juventud estudiosa su personaje empezó a abrirse paso en esas oficinas que ella visitaba todos los días a primera hora de la maña para presentar “el parte de orden publico ante las altas autoridades”, lo que le dictaba en su trastorno una mente ya ocupada en residir en ese nuevo estilo de vida.

Fue tal el estilo que impuso en su adaptación esquizofrénica que los celadores del Palacio Municipal en la esquina de la Plaza de Bolívar le cogieron cariño y le permitían la entrada aprovechando su visita para mofarse de ella haciéndole venias y tratándola con la misma cortesía servil que usaban cuando llegaban por ejemplo los comandantes de la Policía y el Ejército en visita al Gobernador o Alcalde.

 

Su presencia se volvió cotidiana y llegó a impresionar al mismo gobernador, el médico Gilberto Castaño Robledo en mis tiempos de secretario auxiliar del personaje, quien de verla tan centrada en su papel de guardiana de la tranquilidad ciudadana en horas nocturnas, por seguirle la cuerda permitió que su secretaria Fabiola Obando Ramírez le permitiera que entrara sin anunciarse a su despacho, donde se cuadraba en tenor militar, chocando los talones de sus botas con un sonoro golpe para cumplir con lo que ya hacía parte de su particular mundo militar.
 

 

 

Recuerdo que en esos tiempos los altos funcionarios tenían tiempo de dar paso a su buen humor así fuera muy negro y en la gobernación le hicieron coro a Castaño Robledo personajes como César Augusto López Arias y otros que se deleitaban con la singular visita de esta comandante del Batallón San Mateo a la que habían dotado de un uniforme con todas las condecoraciones extraído en secreto por algún colega militar que igualmente hacía parte de esta comedia.

 

 

La Pola duró muchos años portando su uniforme matizado por sus botas hasta la rodilla, propias de los jinetes en sus ejercicios de terreno sin dejar jamás su porte altivo y vertical ante los que consideraba sus jefes y la gente del común que mantenía en la plaza de Bolívar pendientes de su marcial paso.

Alguna vez se desapareció y luego se comentó aunque sin confirmar que la desafortunada señora se había ahogado en los tanques que surtían el agua potable para Pereira y que su cadáver en descomposición fue encontrado a los muchos días, por lo que alguno de los desocupados de la plaza comentaba con una sonrisita burlona que todos nos habíamos tomado la infusión de la pobre señora muerta en el combate contra la demencia que al fin perdió pero sin abandonar en ningún momento la trinchera de su dignidad.

 

CHARLAS CON UN MAESTRO SAMMASATI

Por: Gongpa Rabsel Rinpoché
Lama Sammasati para Latinoamérica

 

Domina tu Mente:
Reflexiones sobre el Upadesha 80 del Dhammapada

 

El Upadesha 80 "El Control de la Mente" del dhammapada, es una profunda reflexión sobre el poder de la mente y la importancia de dominarla: "Aquellos que construyen canales para el agua, dominan las aguas, los constructores de flechas hacen las flechas rectas, los carpinteros dominan la madera y los sabios dominan su propia mente."

 

Este verso simple establece una poderosa analogía: así como los artesanos dominan su oficio, los sabios dominan su mente. La mente, al igual que el agua, la madera o una flecha, puede ser moldeada y dirigida.

¿Por qué es tan importante dominar la mente?

• Fuente de sufrimiento: Muchos de nuestros sufrimientos son el resultado de pensamientos negativos y patrones mentales destructivos.

• Clave para la felicidad: Al dominar la mente, podemos cultivar la felicidad, la paz interior y la claridad mental.

• Potencial ilimitado: Una mente disciplinada es una mente creativa y poderosa, capaz de alcanzar grandes logros.

¿Cómo podemos dominar nuestra mente?

• Meditación: La meditación es una práctica que nos permite observar nuestros pensamientos y emociones sin juzgarlos, lo que nos ayuda a desarrollar una mayor conciencia de nuestra mente.

• Mindfulness: La atención plena nos permite vivir el momento presente sin dejarnos llevar por nuestros pensamientos.

• Desarrollo de la voluntad: La voluntad es la fuerza que nos permite tomar decisiones conscientes y superar los obstáculos.

• Cultivo de virtudes: Virtudes como la compasión, la paciencia y la sabiduría nos ayudan a transformar nuestra mente.

¿Qué beneficios obtenemos al dominar nuestra mente?

• Mayor claridad mental: Una mente disciplinada es capaz de concentrarse y tomar mejores decisiones.

• Menos estrés: Al dominar nuestros pensamientos, podemos reducir el estrés y la ansiedad.

• Mejores relaciones: Una mente pacífica nos permite relacionarnos con los demás de manera más compasiva y empática.

• Mayor satisfacción en la vida: Al vivir en el presente y apreciar las cosas simples, podemos experimentar una mayor satisfacción en la vida.

El Upadesha 80 nos invita a asumir la responsabilidad de nuestra propia mente. Al igual que un artesano perfecciona su oficio, podemos cultivar una mente disciplinada y enfocada.

Si tienes alguna inquietud o comentario, no dudes en ponerte en contacto conmigo al correo gongparabsel@gmail.com o al WhatsApp +57 314 623 83 08.

 

 

 

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