Cayó uno de los criminales más buscados de
Pereira: El Zarco, cabecilla de ‘La Cordillera’

La Policía Nacional ha dado un golpe significativo al crimen organizado en el
Eje Cafetero con la captura de Jhon Andrés Silva Patiño, alias "El Zarco", quien
estaba en la lista de los delincuentes más buscados en la región. El sujeto,
identificado como uno de los principales cabecillas de la organización criminal
‘La Cordillera’, fue detenido en un operativo conjunto entre la Policía y la
Fiscalía General de la Nación.
De acuerdo con el general Carlos Fernando Triana, comandante de la Policía
Nacional, este operativo representa un avance crucial en la lucha contra el
narcotráfico y las actividades criminales en Risaralda. “Alias El Zarco era uno
de los principales articuladores del crimen en esta zona del país. Con su
detención, logramos afectar el funcionamiento de ‘La Cordillera’ y reducir su
capacidad de acción”, explicó Triana a través de su cuenta oficial en X.
Silva Patiño, con antecedentes por porte ilegal de armas, es señalado como uno
de los mayores responsables de la expansión de las drogas sintéticas en la
región. Además, se le vincula con múltiples asesinatos selectivos, uno de los
métodos utilizados por la banda para mantener su dominio territorial en Pereira,
Dosquebradas y La Virginia.
El proceso de captura de "El Zarco" se basó en meses de investigaciones y
seguimientos, que permitieron a las autoridades descubrir su rol clave en la
estructura criminal. ‘La Cordillera’ es una de las organizaciones más temidas en
el Eje Cafetero, con vínculos directos con el narcotráfico y la distribución de
sustancias ilegales. La detención de este líder representa, según las
autoridades, un golpe certero a las operaciones de la banda.
Silva Patiño fue puesto a disposición de las autoridades judiciales y enfrentará
cargos por concierto para delinquir agravado, porte ilegal de armas y
narcotráfico.
Alias Dollarino: Desmantelando la
conexión de la mafia italiana en el negocio de la droga en Colombia

La captura de Emanuele Gregorini, conocido en el mundo criminal como Dollarino,
en Cartagena la semana pasada, ha dejado al descubierto una compleja red de
narcotráfico que conecta a Colombia con las mafias
italianas más poderosas. El arresto de este cabecilla del ‘Sistema Mafioso
Lombardo’, que incluye a grupos tan notorios como la Camorra, la Cosa Nostra y
la ‘Ndrangheta, revela cómo los criminales italianos han logrado infiltrarse en
el país con una sofisticación que hasta ahora había sido difícil de detectar.
Según informes de inteligencia de la Policía Nacional, Dollarino fue enviado por
la mafia italiana con la misión de reorganizar y fortalecer las operaciones de
su red en Suramérica. Este no era un fenómeno nuevo en Colombia, pero su captura
ha marcado un punto de inflexión al evidenciar el creciente poder y la expansión
de estos grupos en territorio colombiano. A lo largo de los últimos años,
agentes de inteligencia han logrado identificar a más mafiosos italianos en el
país, como Gustavo Nogueira y Luigi Belvedere, capturados en 2024, quienes
también están vinculados a las mafias de Nápoles y Caserta.
La tarea de Dollarino era clara:
reconstruir las rutas de narcotráfico afectadas por las anteriores capturas y
consolidar nuevos canales para el envío de cocaína hacia Europa, particularmente
hacia regiones clave en Italia como Lombardía y Sicilia. Para ello, había
establecido redes no solo en Colombia, sino también en Panamá, Costa Rica,
República Dominicana y Brasil. Su objetivo
|
|
era asegurar que el
flujo de droga nunca se detuviera, incluso ante los constantes golpes de las
autoridades.
La operación de las mafias italianas en Colombia ha sido facilitada por alianzas
con grupos locales. El clan del Golfo y los
Costeños, dos de las estructuras criminales más poderosas en la costa Caribe, se
han convertido en aliados estratégicos de los mafiosos italianos. Estas alianzas
permiten a los italianos garantizar el envío de cocaína a Europa, mientras que
los grupos locales obtienen beneficios de la experiencia logística, financiera y
operativa de sus socios europeos.
En este esquema, los italianos utilizan una táctica de subcontratación. En el
caso de Dollarino, se descubrió que utilizaba redes locales para garantizar su
seguridad y el transporte de la droga. Estas redes se encargan de diversas
tareas logísticas, como el manejo de seguridad y el transporte, lo que permite a
los mafiosos italianos operar con menos riesgos.
Además, las mafias italianas han perfeccionado sus métodos de ocultamiento para
evitar la detección de la droga. Según fuentes judiciales, uno de los métodos
más comunes es el uso de contenedores térmicos, lo que hace que la detección sea
extremadamente difícil. Otra técnica avanzada que emplean es la clonación de
precintos de seguridad mediante impresoras 3D, lo que les permite manipular los
envíos sin dejar rastros visibles de alteración.
Lo que más sorprende de la operación de Dollarino es su capacidad para
mantenerse en el radar sin levantar sospechas. Usando tácticas de bajo perfil,
no poseía propiedades a su nombre, se movía constantemente entre Cartagena,
Barranquilla y Santa Marta, alquilando apartamentos de lujo y cambiando de
residencia cada 10 a 15 días. Su presencia en estas ciudades pasó desapercibida
por largo tiempo, aprovechando el turismo para mezclarse con los visitantes
durante eventos como el Carnaval de Barranquilla.
La colaboración internacional jugó un papel crucial en su captura. La Policía
Nacional de Colombia trabajó de la mano con agencias europeas, incluyendo el
Interpol Cooperation Against ‘Ndrangheta (Ican), los Carabinieri de Milán y las
autoridades del Reino Unido. La colaboración estratégica con el Reino Unido se
debió en parte al interés de ese país en frenar el tráfico de droga, ya que gran
parte de la cocaína tenía como destino su territorio. Además, los flujos
financieros generados por estas operaciones ilícitas a menudo terminan en bancos
en Londres y otras ciudades europeas.
El director de la Policía Nacional,
Carlos Fernando Triana, destacó que la captura de Dollarino es un golpe
significativo contra el crimen organizado transnacional. “Es un resultado de la
cooperación eficaz entre la Policía Nacional de Colombia y las autoridades
internacionales de Italia y el Reino Unido”, declaró.
Aunque Dollarino fue arrestado, la mafia italiana sigue presente. Las
investigaciones indican que varios familiares de Gregorini han llegado a
Colombia bajo el pretexto de acompañarlo, pero en realidad están allí para
asegurar las redes que él había establecido durante su tiempo en el país. Este
escenario deja claro que, aunque se haya dado un golpe importante al crimen
organizado, la lucha continúa y las mafias ya están planeando su próximo
movimiento.
Enfrentamientos en Nariño dejan dos muertos y
varios heridos entre Ejército y disidencias de las FARC

El conflicto armado en el sur del país sigue dejando su huella. El martes 25 de
marzo, la Tercera División del Ejército confirmó la muerte de dos combatientes
durante un enfrentamiento con miembros de la estructura Iván Ríos, disidencia de
las FARC, en el municipio de Ricaurte, Nariño. Además de los fallecidos, las
autoridades informaron que dos integrantes de la disidencia fueron capturados y
uno de ellos resultó herido en el combate.
El enfrentamiento se produjo en la
vereda Palpis, donde las tropas del Batallón de Despliegue Rápido No. 4, tras un
trabajo de inteligencia, lograron ubicar a los miembros de esta estructura
armada, conocida por su vínculo con diversas acciones violentas contra la
población civil.
|
|
Según el Ejército, estos grupos ilegales suelen ejercer presión sobre los
pobladores, utilizándolos como instrumentos en su lucha armada.
“Tras meses de trabajo de inteligencia y un análisis detallado de la situación
en la zona, decidimos ejecutar una operación que neutralizara la amenaza.
Durante el operativo, la tropa inició los combates al ubicar al grupo armado”,
indicó el Ejército en un comunicado. En el sitio, además de los fallecidos y
capturados, se incautaron varias armas de fuego, incluidos dos fusiles, un
revólver, siete cargadores y un chaleco de uso exclusivo de las Fuerzas
Militares.
El combate en Nariño se da en medio de un contexto de creciente violencia en la
región, donde las disidencias de las FARC, responsables de extorsiones,
reclutamiento forzado y desplazamiento de civiles, siguen sembrando terror en
varias poblaciones.
Poco después de esta operación, el Ejército también confirmó otro hecho trágico
ocurrido el 24 de marzo, en la vereda El Morrito, también en Nariño. Un militar,
el teniente Mario Germán González Cobo, perdió la vida en un accidente durante
una operación de control cuando una granada explotó. Otros dos soldados
resultaron heridos. El Ejército aclaró que el hecho fue un accidente, aunque
algunas versiones iniciales apuntan a una posible rencilla interna, algo que aún
está siendo investigado.
El Ejército Nacional lamentó profundamente la muerte del teniente y expresó su
solidaridad con las familias afectadas. Al respecto, la institución ha prometido
realizar todas las investigaciones necesarias para esclarecer las circunstancias
de la tragedia, mientras se continúa con las operaciones para restaurar el orden
en el departamento.
El Ejército Nacional incauta más de dos toneladas
de cocaína del Clan del Golfo en Antioquia

En una exitosa operación realizada en el Bajo Cauca antioqueño, el Ejército
Nacional de Colombia incautó 2.050 kilogramos de clorhidrato de cocaína,
pertenecientes al temido Clan del Golfo, una de las organizaciones criminales
más poderosas del país. La incautación se llevó a cabo en la vereda Caño Prieto,
ubicada en la zona rural del municipio de Cáceres, en el departamento de
Antioquia, donde las tropas también lograron destruir un laboratorio de
procesamiento de cocaína.
El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, confirmó la operación y destacó la
efectividad de las tropas en la localización de este centro de producción
ilegal. Además de la cocaína, se incautaron 1.200 kilos de insumos sólidos y más
de 3.600 galones de insumos líquidos, elementos esenciales en la fabricación de
narcóticos. También fueron decomisados hornos, prensas y maquinaria utilizada en
el procesamiento, así como un vehículo que servía para el transporte de los
productos.
Sánchez, a través de su cuenta oficial en X, señaló la importancia de este golpe
al narcotráfico. “Golpe al narcotráfico. Tropas del Ejército localizaron y
destruyeron un laboratorio para el procesamiento de clorhidrato de cocaína del
GAO Clan del Golfo en Caño Prieto, Cáceres, Antioquia”, publicó el ministro,
subrayando que la lucha contra el crimen organizado en la región sigue siendo
una prioridad.
El Clan del Golfo, conocido también como el Ejército Gaitanista de Colombia (EGC),
es considerado la organización criminal más poderosa del país, con control sobre
importantes rutas de narcotráfico y una amplia capacidad de operación en
diversas zonas del territorio colombiano. Este grupo ha sido blanco de
operaciones militares constantes, debido a su involucramiento en actividades
ilícitas como el narcotráfico, la minería ilegal y el desplazamiento forzado de
comunidades.
El Ministro de Defensa también destacó que, más allá de las incautaciones, el
impacto social de estas operaciones es crucial. “Tenemos que acabar con la
explotación que los capos del narcotráfico realizan a nuestros campesinos para
que dependan de las economías ilícitas, trayendo de paso pobreza y violencia”,
expresó Sánchez, haciendo hincapié en la necesidad de continuar con estos
operativos para garantizar el bienestar de los colombianos.
|