4-El Imparcial

 

NACIONAL

 

Pereira, Colombia - Edición: 13.470-1050

Fecha: Miércoles 23-04-2025

 

El desafío sanitario y económico de la campaña de vacunación contra la fiebre amarilla den Colombia
 



En medio de la creciente preocupación por el brote de fiebre amarilla que ha cobrado la vida de al menos 34 personas en Colombia, el Gobierno Nacional se enfrenta a un desafío monumental: financiar una campaña de vacunación masiva en al menos 10 departamentos del país. Según el presidente Gustavo Petro, la inversión necesaria podría oscilar entre $600.000 millones y $1 billón, un gasto significativo que el Ejecutivo busca cubrir mediante recursos provenientes de fideicomisos de bancos, destinados originalmente a proyectos viales concesionados.

Durante una reciente alocución en la Casa de Nariño, Petro explicó que, debido a la falta de fondos disponibles en el presupuesto de 2025, se hace urgente la movilización de estos recursos. "Este es un tema de vida o muerte", afirmó el mandatario, reconociendo que el costo inicial de la campaña podría elevarse dependiendo de la velocidad de propagación del virus. Según Petro, gran parte de los recursos necesarios provendrán de los contratos de concesión de las vías 4G y 5G, los cuales, debido al incumplimiento de los concesionarios, mantienen más de $8 billones guardados en fideicomisos bancarios.

Este plan se ejecutará bajo un contexto de emergencia sanitaria nacional, declarada oficialmente por el Ministro de Salud, Guillermo Jaramillo. La medida busca vacunar a toda la población entre 9 meses y 59 años, priorizando las zonas de mayor riesgo, especialmente aquellas afectadas por la presencia del mosquito transmisor del virus, el Aedes aegypti. Con el cambio climático, el insecto ha logrado expandir su hábitat a zonas más altas, lo que ha incrementado los riesgos en áreas como el Eje Cafetero.

Hasta la fecha, más de medio millón de personas han recibido la vacuna, y se han distribuido más de 3,7 millones de dosis en los 32 departamentos del país. Sin embargo, las autoridades insisten en que, debido al comportamiento errático del virus, la vacunación debe ser rápida y eficaz para evitar mayores pérdidas humanas. En Bogotá, por ejemplo, se han registrado dos muertes por fiebre amarilla, aunque las víctimas ya habían contraído el virus antes de llegar a la capital.

El presidente Petro también advirtió que, si los recursos provenientes de los fideicomisos no son suficientes para cubrir el costo de la campaña, el Gobierno recurrirá a una emergencia económica. "Con mecanismos extraordinarios, buscaremos garantizar la financiación para que Colombia salga airosa de esta crisis", concluyó el mandatario, subrayando la gravedad de la situación y la urgencia de una respuesta inmediata.

Este panorama refleja la difícil situación que enfrenta el país, donde la lucha contra una enfermedad mortal se ve directamente afectada por la falta de recursos y la gestión de los contratos públicos.


La pobreza multidimensional en Colombia: Retos persistentes de formalización laboral y educación




El panorama de la pobreza en Colombia sigue siendo un desafío complicado para el país, a pesar de los avances en algunas
áreas. El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) dio a conocer el martes los nuevos datos sobre la pobreza multidimensional para el año 2024, un indicador que no solo mide los ingresos de las familias, sino también su acceso a bienes y servicios básicos para una vida digna, como salud, educación, empleo y servicios públicos. Según el informe, para el 2024, el 11,5 % de los hogares colombianos se encontraba en situación de pobreza multidimensional, lo que representa una ligera disminución con respecto al 12,1 % registrado en 2023.

Este descenso es alentador, ya que indica que aproximadamente 251.000 colombianos
han salido de esa condición el año pasado. No obstante, el número total de personas en pobreza multidimensional sigue siendo alarmante: según los datos analizados,

 

 

 

alrededor de seis millones de colombianos continúan enfrentando dificultades en varios aspectos de su vida diaria, además de los ingresos. En términos absolutos, las regiones más afectadas siguen siendo las más periféricas, como Vichada, Guainía y Chocó, donde las tasas de pobreza multidimensional alcanzan cifras tan altas como el 70,2 %, 49 % y 33,9 %, respectivamente.

A nivel regional, Bogotá y la región Central mostraron un aumento en la pobreza multidimensional, aunque en menor medida. En Bogotá, la pobreza subió del 3,6 % al 5,4% , un incremento significativo pero no alarmante. Mientras tanto, en la región Central, el porcentaje pasó del 10,2 % al 10,8 %. Estos aumentos no son grandes, pero reflejan las dificultades que enfrenta la capital y sus alrededores para afrontar las carencias que todavía afectan a miles de hogares.

Lo que más impacta de las cifras del DANE es que la informalidad laboral y la falta de educación son los dos factores que más inciden en la pobreza multidimensional. El trabajo informal sigue siendo uno de los mayores obstáculos para salir de la pobreza, ya que el 70,7 % de los hogares colombianos reportan vivir en condiciones de empleo informal. Esta situación genera precariedad y, a menudo, ausencia de acceso a servicios de salud, pensiones y otras prestaciones sociales esenciales.

Además, el bajo nivel educativo se mantiene como un factor crucial, ya que un 38,3 % de los hogares colombianos carecen de acceso a una educación básica completa. La falta de formación limita las oportunidades de empleo formal y perpetúa el ciclo de pobreza de generación en generación. En este contexto, el desafío para el país es claro: mejorar la calidad educativa y promover la formalización del empleo son tareas urgentes si se quiere reducir de manera significativa la pobreza.

Otro dato revelador del informe es la situación de los hogares con jefatura femenina. En 2024, el 12,9 % de estos hogares vivían en pobreza multidimensional, un porcentaje más alto que el de los hogares con jefatura masculina, que se situó en el 10,4 %. Esta diferencia de 2,5 puntos es una muestra de la desigualdad de género persistente en Colombia, especialmente en áreas rurales y en la región Caribe, donde las mujeres enfrentan mayores barreras para acceder a una vida digna.

En cuanto a la población migrante, los hogares con miembros venezolanos siguen estando muy por encima del promedio nacional en pobreza multidimensional. En 2024, la incidencia fue del 37,2 %, una mejora con respecto al 52,3 % de 2023, pero aún una cifra alarmante. Esto refleja las dificultades adicionales que enfrentan los migrantes en Colombia, quienes no solo luchan por conseguir empleo formal, sino también por acceder a servicios básicos y a una educación adecuada.

Si bien las cifras muestran algunos avances en la reducción de la pobreza, está claro que los grandes retos siguen siendo la informalidad laboral, el rezago educativo y la pobreza persistente en las regiones periféricas del país. Para superar estos obstáculos, será necesario un esfuerzo coordinado entre el gobierno nacional y los gobiernos locales para implementar políticas que fomenten la formalización del empleo y mejoren el acceso a la educación de calidad, especialmente en las zonas más vulnerables.
 

‘Paz total’ en Colombia: Avances, retos y desafíos en el camino hacia la paz




El proceso de 'paz total' propuesto por el presidente Gustavo Petro está en una encrucijada crítica, con fechas límite que acercan a las disidencias de las FARC y al Gobierno Nacional a decisiones cruciales. Con apenas días restantes para la expiración del decreto de conmoción interior en el Catatumbo y un ultimátum que vence el 18 de mayo para las disidencias de Alexander Mendoza, alias ‘Calarcá’, el futuro del acuerdo de paz se encuentra en una tensa espera.

El presidente Petro, durante el Consejo de Ministros, advirtió que decidirá si prorroga el decreto de conmoción interior en el Catatumbo dependiendo de los avances logrados en los proyectos de infraestructura y otros compromisos que el Gobierno asumió en la región. Desde que se implementó esta medida, el conflicto armado ha desplazado a más de 64.000 personas, lo que subraya la dificultad de implementar una paz duradera en áreas tan golpeadas por la violencia. Petro subrayó que la prórroga no será una decisión automática, sino que dependerá de los avances concretos en la región: “si se ha perdido el tiempo, hay que pensarlo bien. La prórroga debe ser una necesidad imprescindible,

 

 

 

no porque se perdió el tiempo”, señaló.

Al mismo tiempo, el Gobierno ha suspendido las operaciones militares y de policía contra las disidencias de ‘Calarcá’ a través del Decreto 448 de 2025, aunque no ha prorrogado el cese al fuego. Esta medida tiene como objetivo presionar a los grupos armados a cumplir con el acuerdo de concentrarse en las zonas previamente acordadas. El mandatario explicó que, aunque las ofensivas han sido detenidas, las fuerzas armadas tienen la orden de actuar contra cualquier ataque dirigido hacia la población civil. Según Petro, los grupos en proceso de diálogo tienen hasta el 18 de mayo para avanzar hacia las zonas de concentración en el Catatumbo, un paso clave para entrar a un proceso de paz más avanzado.

Sin embargo, la propuesta de las zonas de concentración ha generado preocupación, especialmente entre los analistas de seguridad y los defensores de derechos humanos. Leonardo González Perafán, director de Indepaz, alertó sobre los riesgos de poner a las comunidades en el centro de un conflicto entre los grupos armados por el control territorial. “¿Quién va a responder por los desplazamientos, el reclutamiento o las extorsiones que esto puede traer?”, cuestionó González. Este temor resalta la fragilidad del proceso y la dificultad de garantizar la seguridad de los civiles en medio de una transición tan compleja.

Las zonas de concentración, según la Ley 2272 de 'paz total', no serán zonas de despeje y deben garantizar la presencia del Estado de Derecho. No obstante, se prevé que los grupos armados reciban ciertos beneficios, como la suspensión temporal de órdenes de captura, con el fin de facilitar el proceso de paz. A pesar de los beneficios que podrían ofrecer estas zonas, la incertidumbre sobre cómo se implementarán sigue siendo una barrera significativa para avanzar en el acuerdo.

A medida que se acerca el vencimiento del plazo, el proceso de 'paz total' se encuentra en una fase decisiva. Los grupos armados deberán responder al ultimátum del presidente, mientras que el Gobierno continúa evaluando si la prórroga de medidas como la conmoción interior es necesaria para evitar una mayor escalada del conflicto. El camino hacia la paz total sigue siendo incierto, pero las decisiones que se tomen en los próximos días podrían determinar el futuro de esta histórica negociación.


Cali, séptima ciudad más peligrosa de Latinoamérica según informe de Numbeo

 



En un reciente informe de la plataforma internacional Numbeo, la ciudad de Cali ha sido clasificada como la séptima más peligrosa de Latinoamérica en 2025. Con una tasa de criminalidad de 71,3 puntos sobre 100, Cali se posiciona por encima de otras grandes ciudades, las cuales son capitales, como Lima, Bogotá y Buenos Aires, lo que refleja la creciente preocupación por la seguridad en la ciudad.

Álvaro Pretelt, subsecretario de políticas de seguridad de la ciudad, reconoció que, aunque los homicidios han aumentado este año, las autoridades están implementando medidas para contrarrestar la criminalidad. De hecho, Cali realiza más de 75 operativos de seguridad a la semana. Sin embargo, el subsecretario explicó que el aumento de homicidios no solo se debe a las tradicionales bandas criminales, sino también a problemas de convivencia.

Pretelt destacó que uno de los factores que está impulsando los homicidios es el consumo excesivo de alcohol, especialmente los domingos, cuando el número de muertes violentas tiende a aumentar debido a riñas derivadas del consumo de licor. "No todo se explica por actores criminales. A veces los homicidios son el resultado de disputas personales, muchas veces relacionadas con el consumo de alcohol", señaló el funcionario.

Este patrón ha cambiado la dinámica de seguridad de la ciudad, que el año pasado experimentó una significativa reducción de homicidios, contribuyendo en un 60 % a la disminución a nivel nacional. A pesar de los avances, la situación actual sigue siendo un desafío para las autoridades locales, quienes se enfrentan a una situación compleja donde tanto las dinámicas criminales como los problemas sociales influyen en la violencia.

El índice de Numbeo, que se basa en datos sobre violencia y la percepción de seguridad ciudadana, refleja una tendencia preocupante en Cali. Aunque las autoridades continúan trabajando en la prevención y el control del delito, los habitantes de la ciudad siguen viviendo con el temor constante de la inseguridad, lo que plantea retos adicionales para el futuro de la ciudad y su desarrollo social.

 

 

 

Submit

 

 © El Imparcial Editores S.A.S  |   Contacto 57 606 347 7079  

    © 1948-2009 - 2025 - El Imparcial - La idea y concepto de este periódico fue hecho en Online Periodical Format (OPF) que es un Copyright de ZahurK.

    Queda prohibido el uso de este formato e idea (OPF) sin previa autorización escrita de ZahurK