Derecha británica arrebata escaño a
laboristas y se afianza en elecciones

El partido británico de extrema derecha Reform UK logró una victoria
clave en las elecciones legislativas parciales en Inglaterra, al
imponerse en una circunscripción del norte del país y avanzar en
varios comicios locales. La jornada representó un duro revés para
los laboristas, que enfrentaban su primer gran examen tras llegar al
poder en julio de 2024, y para los conservadores, que siguen
perdiendo apoyo.
Los laboristas británicos (centroizquierda) perdieron un escaño en
el Parlamento en la circunscripción de Runcorn y Helsby, al noroeste
de Inglaterra, en beneficio de Reform UK.
La victoria fue celebrada por el líder del partido, Nigel Farage,
quien afirmó en X (antes Twitter) que el resultado “demuestra que
ahora somos el partido de la oposición al gobierno laborista” del
primer ministro Keir Starmer.
Para el partido, es un momento muy, muy importante", añadió Farage,
uno de los principales impulsores del Brexit, que centró su campaña
en temas de migración irregular.
Starmer, por su parte, calificó de "decepcionante" la derrota de su
partido en esa circunscripción, aunque reiteró su compromiso con
avanzar “más lejos y más rápido” en las reformas prometidas.
El resultado confirma el ascenso de Reform UK y la extrema derecha
en el Reino Unido, así como la creciente fragmentación política de
cara a las elecciones legislativas de 2029.
Además del escaño parlamentario, estaban en juego 1.641 puestos en
consejos municipales y de condado, así como seis alcaldías. Reform
UK ganó por primera vez tres consejos condales y una alcaldía.
Los laboristas, en tanto, obtuvieron tres de las seis alcaldías en
disputa, mientras que los conservadores se quedaron con una.
Victoria por seis votos
La candidata de Reform UK, Sarah Pochin, venció por apenas seis
votos a la aspirante laborista, Karen Shore, en la elección parcial
del jueves en Runcorn y Helsby.
Con este triunfo, el partido de Farage cuenta ahora con cinco
escaños en el Parlamento británico, de un total de 650, tras su
avance sin precedentes en las elecciones de julio de 2024.
Previo a estos comicios, las encuestas indicaban que la ciudadanía
estaba preocupada por el bajo crecimiento económico, el aumento de
la migración irregular y la crisis en los servicios públicos.
La elección se convocó tras la renuncia del diputado laborista Mike
Amesbury, condenado por agredir a un hombre durante una pelea
nocturna.
En julio, los laboristas habían ganado esa circunscripción con el
53% de los votos, frente al 18% obtenido por Reform UK.
En las elecciones generales de julio de 2024, los laboristas
lograron una mayoría aplastante con 412 escaños, pese a obtener solo
el 33,7% de los votos, favorecidos por el sistema electoral
británico.
Los conservadores obtuvieron el 24% de los votos y 121 escaños,
marcando la peor derrota en su historia.
Reform UK alcanzó cinco escaños, aunque posteriormente perdió uno
tras la expulsión de un diputado. Aun así, se trata del mejor
resultado jamás logrado por un partido de extrema derecha en Reino
Unido.
Crisis en laboristas y conservadores
Actualmente, el Partido Laborista enfrenta un regreso complicado al
poder, tras 14 años en la oposición.
Starmer no ha logrado
reactivar la economía, y su gobierno ha sido criticado
por suprimir ayudas sociales.
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Los comicios
también fueron una prueba para Kemi Badenoch, nueva líder del Partido
Conservador, que intenta reconstruir la colectividad tras su colapso electoral.
"La renovación de nuestro partido apenas comienza", declaró Badenoch.
Según una encuesta de YouGov publicada el martes, Reform UK lidera la intención
de voto con un 26%, por encima de laboristas (23%) y conservadores (20%).
"Es una tendencia similar a la que se observa en Europa occidental, donde los
grandes partidos pierden votos y la política se fragmenta", explicó Anand Menon,
profesor del King's College de Londres.
Venezuela rechaza orden de la CIJ sobre elecciones
en el Esequibo

El gobierno de Venezuela rechazó este viernes una orden de la Corte
Internacional de Justicia (CIJ) que exige suspender las elecciones previstas en
el territorio en disputa con Guyana, conocido como el Esequibo, al tiempo que
reafirmó que no reconoce la jurisdicción del máximo tribunal de la ONU en este
caso.
Venezuela "no reconoce ni reconocerá jamás ni la jurisdicción de la Corte
Internacional de Justicia (CIJ) ni acatará decisión alguna que emane de ésta",
indica un comunicado en referencia al Esequibo, territorio de 160.000 km² en el
centro de un litigio centenario entre Caracas y Georgetown, reavivado en 2015
tras el hallazgo de grandes yacimientos de petróleo por parte de ExxonMobil.
Venezuela celebrará el 25 de mayo elecciones para elegir diputados del
Parlamento, gobernadores regionales y, por primera vez, autoridades para la
región del Esequibo.
El gobierno venezolano calificó de "abusivas e intervencionistas" las medidas
provisionales solicitadas por Guyana.
"Nada en el derecho internacional permite a la CIJ inmiscuirse en asuntos que
son exclusividad del derecho interno de Venezuela, ni pretender prohibir un acto
soberano", añadió el comunicado.
Guyana defiende un laudo arbitral de 1899 firmado en París que estableció las
fronteras actuales y pide a la CIJ que lo ratifique.
Por su parte, Venezuela apela al Acuerdo de Ginebra de 1966, firmado con Reino
Unido antes de la independencia de Guyana, el cual anulaba dicho laudo y
proponía una solución negociada.
"Venezuela exige nuevamente al gobierno de Guyana dejar de dilatar las
negociaciones directas y cumplir estrictamente el Acuerdo de Ginebra, como único
camino válido para una solución definitiva, pacífica y satisfactoria para ambas
partes", expresa el comunicado.
El gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) postuló al almirante
Neil Villamizar, excomandante de la Armada, como gobernador del Esequibo.
Por su parte, las autoridades de Guyana han advertido que toda persona designada
como autoridad venezolana en el Esequibo será arrestada y acusada de "traición",
al igual que quienes los apoyen.
Millonaria multa a TikTok por fallos de
protección de datos en China
La Unión Europea (UE) impuso este viernes una multa de 530 millones de euros a
TikTok por no garantizar adecuadamente la
protección de datos personales de
usuarios europeos almacenados en China.
Durante la investigación, efectuada en nombre del bloque por la autoridad
irlandesa de protección de datos (DPC), la plataforma —en manos de un grupo
chino— reconoció haber albergado en el país asiático datos de
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usuarios europeos,
algo que hasta ahora había negado.
"TikTok no verificó,
garantizó ni demostró que los datos personales de los usuarios (europeos), a los
que los empleados de China pueden acceder de forma remota, gozan de un nivel de
protección esencialmente equivalente al garantizado en la UE", declaró Graham
Doyle, responsable de comunicación del regulador irlandés.
Por lo tanto, TikTok no está en capacidad de ofrecer garantías frente al
"potencial acceso de las autoridades chinas" a estos datos, en virtud de las
leyes chinas antiterroristas, contra el espionaje y otras disposiciones
consideradas divergentes de las normas de la Unión Europea, añadió Doyle en un
comunicado.

TikTok anunció rápidamente que planea apelar la sanción y afirmó que "nunca ha
recibido una solicitud" de las autoridades chinas para acceder a los datos de
los usuarios europeos.
El gigante de las redes sociales lleva años bajo el escrutinio de los gobiernos
occidentales por el temor a que China utilice los datos personales con fines de
espionaje o propaganda.
TikTok también infringió el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) de
la UE al transferir datos de usuarios a China, indicó la declaración del DPC.
La decisión del viernes "incluye multas administrativas por un total de 530
millones de euros y una orden que obliga a TikTok a ajustar su procesamiento de
datos a la
normativa en un plazo de seis meses", detalló.
Instalan chimenea en la Capilla Sixtina para el cónclave

El Vaticano instaló este viernes la chimenea en la Capilla Sixtina, desde donde
se anunciará si los cardenales de la Iglesia católica han elegido al sucesor del
Papa Francisco.
Unos cuatro o cinco bomberos de la Santa Sede subieron al hastial del tejado del
majestuoso edificio para colocar el humero: un cilindro marrón estrecho en la
parte delantera.
Los trabajos pasaron desapercibidos para los muchos turistas presentes en la
plaza de San Pedro.
Pero a partir del próximo miércoles, millones pondrán su mirada en esa chimenea.
Un total de 133 cardenales se encerrarán desde el miércoles bajo los frescos de
Miguel Ángel en la Capilla Sixtina para votar al nuevo líder de 1.400 millones
de católicos.
Los cardenales quemarán en una estufa las papeletas de la votación para anunciar
al mundo el resultado.
Si un papa es electo, el humo es blanco y querrá decir que "Habemus papam".
Mientras no haya un consenso, se queman cada dos sesiones de votación con una
sustancia especial que emana humo negro por la chimenea.
Los llamados "príncipes de la Iglesia" celebrarán cuatro votaciones al día: dos
por la mañana y dos por la tarde.
¿Qué es cónclave?
El cónclave es una reunión que se remonta a la Edad Media, cuando la idea de
elegir a un soberano era una idea revolucionaria.
Las notas tomadas por los cardenales también se queman en la estufa.
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