EL IMPARCIAL | Página 12


12-	COLUMNISTAS	Pereira, Colombia - Edición: 13.413-993 Fecha: Sábado 08-02-2025
CHARLAS CON UN MAESTRO SAMMASATI Por: Gongpa Rabsel Rinpoché Lama Sammasati para Latinoamérica El Engaño y La Verdad: Una Perspectiva Budhista sobre las Palabras de Sagan La famosa frase de Carl Sagan: "Una de las lecciones más tristes de la historia es esta: si nos han engañado el tiempo suficiente tendemos a rechazar cualquier evidencia de dicho engaño. Ya no estamos interesados en descubrir la verdad. El engaño nos ha capturado", nos invita a reflexionar sobre la naturaleza humana y nuestra relación con la verdad. Desde una perspectiva budhista, esta afirmación resuena profundamente, ya que el budhismo dedica gran parte de sus enseñanzas a explorar los obstáculos que nos impiden alcanzar la verdadera comprensión. La Mente Condicionada El budhismo enseña que nuestra mente está constantemente condicionada por experiencias pasadas, creencias y percepciones. Estas condiciones pueden crear filtros que distorsionan nuestra visión de la realidad. Cuando somos engañados durante un largo período, estos filtros se fortalecen, haciendo cada vez más difícil reconocer la verdad. El Apego a Nuestras Creencias El apego a nuestras creencias, por más arraigadas que estén, es otro obstáculo importante. A menudo, nos aferramos a nuestras ideas preconcebidas con tanta fuerza que rechazamos cualquier información que las contradiga. Este apego puede ser tan fuerte que incluso negamos la evidencia que está justo frente a nosotros. El Camino hacia la Verdad El budhismo ofrece un camino para liberarnos de estas limitaciones. La práctica de la atención plena (mindfulness) nos permite observar nuestros pensamientos y emociones sin juzgarlos, lo que nos ayuda a identificar los patrones de pensamiento que nos mantienen atrapados en el engaño. La sabiduría, cultivada a través de la reflexión y el estudio, nos permite ver las cosas como realmente son, más allá de nuestras propias interpretaciones. En Conclusión, las palabras de Sagan nos recuerdan la importancia de mantener una mente abierta y cuestionar nuestras creencias. El budhismo nos proporciona herramientas para cultivar esta apertura y desentrañar las capas de engaño que pueden oscurecer nuestra percepción de la realidad. Al hacerlo, podemos acercarnos cada vez más a la verdad y vivir una vida más plena y significativa.	¿Qué opinas tú? ¿Has experimentado cómo las creencias arraigadas pueden dificultar la aceptación de nuevas ideas? Comparte tus reflexiones en los comentarios. DE AQUÍ Y DE ALLÁ Por: Otoniel Parra Arias ECOS DE UN CONSEJO DE GOBIERNO QUE SE SALIÓ DEL LIBRETO Acerca del concejo con sus ministros, presidido por el presidente Petro, hace algunas horas, se sigue y se seguirá comentando durante mucho tiempo lo estrafalario de una situación que en la turbulenta mente del señor Petro buscó inicialmente solo ser transgresor o retador de lugares comunes, utilizando a mansalva a sus colaboradores más cercanos para darles una lección propia de quinto de primaria, exhibiendo ante el mundo las deficiencias y realidades de quienes serían los primeros sorprendidos por esta estratagema; puestos contra la pared, piernas abiertas y manos arriba para que entregaran todo lo que pensaban para exhibirlo en la mesa del escarnio para solaz de una audiencia -igual de sorprendida- en todo Colombia que se sintió en² alto porcentaje impactada por este cambio de formato más allá de las novelitas turcas de Caracol y RCN, tv., pero con igual o mayor morbosidad por hurgar hacia donde llevaba esta nueva dramaturgia made in Palacio de Nariño. El presidente fue contundente y sincero levantando la montura a la adolorida jaca nacional para que a la luz del día se vieran y se sintiera el olor nauseabundo de esas llagas, algunas de ellas con demasiadas décadas y moscos encima. El ejercicio iba bien pues los más audaces con la consabida salutación al primer mandatario luego se sinceraron y empezaron a expresar porque no estaban contentos debido a personajes que muy pronto ocuparon los primeros lugares, entiéndase Armando Benedetti y Laura Sarabia. Pero debe haber sido muy impactante la sorpresa para los menos maliciosos saber luego de expresiones histriónicas que este ejercicio de “mea culpa” muy utilizado en paneles empresariales de puerta cerrada para airear y purificar la polémica, estaba siendo transmitido en cadena nacional por la batería de comunicación presidencial. Y ahí fue Troya! Y casi imposible parar la verborrea ofendida delatando a posibles culpables de no haber cumplido con lo prometido con una mano sobre la Biblia y otra sobre la Constitución; situación ratificada por el mismo presidente cuando	afirmó que de un 100% solo se estaba cumpliendo un mínimo porcentaje ante el país que esperaba mejores resultados de cambio. El efecto fue desilusionante cuando el jefe del estado reveló que este ejercicio malogrado cada segundo lo había copia de uno similar en la Cuba revolucionaria de Fidel Castro con sus kilométricas alocuciones obligatorias hasta 8 horas de tortura para una ciudadanía que no tenía más para donde mirar. Con el transcurso de las horas, las expectativas y preocupación ciudadana retratada en los medios, no ha hecho sino crecer por la falta de respuestas oficiales ante las dudas planteadas en esta situación muy propia de las obras de teatro tremendistas. Es así como Armando Benedetti, impulsado por el presidente con el cariñoso mote de “loquito inteligente” enfrenta ahora la acusación de la Corte Suprema de Justicia. Algo muy delicado para quien sin abrir la boca para defenderse en este foro, fue creciendo como la levadura hasta conformar su personalidad altisonante de máximo vocero del presidente imposible de eludir de parte de los ministros para temas trascendentales. Al final el episodio en tácito homenaje a los larguísimos discursos de Castro en la Habana y Chávez en Venezuela tuvo la más terrible de las fallas: no se tocó (con la presencia del ministro de la defensa) el atropello de los grupos sediciosos que han tomado al Catatumbo a sangre y fuego desplazando a miles de campesinos para no caer en el fragor de esta guerra que no es suya. Tampoco el delicado estado de la salud en Colombia (también con el minsalud presente) y tampoco se profundizó en el asunto enconado de las relaciones deterioradas con EE.UU. Solo rubricó esta fantasmagórica sesión del malogrado concejo de ministros con el presidente, las alusiones de el mismo respecto a Aureliano Buendía, el país de la belleza injustamente tratado en otras latitudes y las nostálgicas referencias a su época guerrilleril con el M 19 hace unas cuantas décadas.

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