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Suspenden aval de asociación 'Parque El Canadá'
ante denuncia de abuso
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) suspendió de manera
provisional la personería jurídica de la Asociación Parque El Canadá, tras
denuncias de presunto abuso sexual a menores de edad en el Hogar Infantil Canadá
Sede F, ubicado en la localidad de San Cristóbal, Bogotá. La suspensión fue
decretada como medida cautelar por un término inicial de dos meses, prorrogables
por otros dos, mientras se adelantan los procesos administrativos y
sancionatorios correspondientes.
La decisión se fundamenta en la Resolución 0515 del 12 de mayo de 2003, que
reconocía la personería jurídica de la asociación, la cual ahora queda
suspendida provisionalmente. Durante este periodo, el ICBF garantiza la
continuidad en la prestación del servicio público de bienestar familiar a los
beneficiarios en las nueve unidades a cargo de la asociación, asegurando la
protección integral de los derechos de los niños y niñas atendidos.
El cierre temporal del Hogar Infantil Canadá Sede F se produjo luego de que se
recibieran denuncias formales contra un trabajador identificado como Freddy
Castellanos, acusado de abusar sexualmente de al menos doce menores entre 2 y 3
años.
La Fiscalía General de la Nación inició la investigación penal y ordenó la
captura preventiva del presunto agresor, quien fue imputado por acceso carnal
abusivo con menor de catorce años.
El ICBF, además de la suspensión del contrato con la Asociación Parque El
Canadá, activó el protocolo Código Blanco para la atención de víctimas de
violencia sexual y dispuso acompañamiento psicosocial para las familias
afectadas.
También se implementaron medidas de vigilancia y control, como la instalación de
cámaras con acceso en tiempo real para los padres y evaluaciones psicológicas a
los trabajadores de las unidades de atención infantil.
CAR frenó vertimiento ilegal de aguas
industriales en Cajicá
Gracias a una queja anónima, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR),
encontró en flagrancia una actividad de vertimiento
de aguas industriales a una quebrada aledaña a un complejo industrial ubicado en
la vereda Chuntame del municipio de Cajicá.
Tras conocer la queja, un equipo técnico de la dirección regional Sabana Centro
se desplazó al lugar donde se pudo evidenciar que la descarga se realizaba sobre
un cuerpo hídrico próximo al lugar y de manera ilegal, pues no cuenta con
permiso otorgado por la autoridad ambiental.
“Una vez se atendió el requerimiento, recorrimos la quebrada para encontrar el
origen del vertimiento y pudimos establecer una descarga de color blanco,
al parecer
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asociada a
producción de lácteos y olores ofensivos” explicó Liliana Ramírez, directora
regional Sabana Centro de la CAR.
Al encontrarse la actividad en flagrancia, representantes de la empresa
indicaron que la situación obedece a una contingencia presentada en la planta de
tratamiento. Sin embargo, de acuerdo con la queja de la comunidad y la
verificación técnica de la CAR, esta situación se viene presentando de manera
prolongada y recurrente por lo cual esta justificación no fue acogida.
“No cesaremos en nuestra acción de vigilancia y control, especialmente de
empresas, complejos y parques industriales, los cuales conocen su deber de
gestionar permisos ambientales ante la CAR, de lo contario, se exponen a la
aplicación de sanciones y medidas de suspensión tal como lo establece la
normatividad vigente”, puntualizó la Directora Regional Sabana Centro.
Colombia, segundo país con más
periodistas asesinados en la región: CIDH
Un reciente informe de la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) alerta sobre un deterioro
alarmante de la libertad de prensa en Colombia, donde se ha consolidado un
ambiente de violencia, intimidación y censura contra medios independientes.
Según el documento, Colombia fue en 2024 el segundo país más letal para
periodistas en las Américas, con al menos siete asesinatos registrados.
La CIDH denuncia que estos hechos no ocurren de manera aislada, sino en un
contexto de “riesgos estructurales para el ejercicio del periodismo”,
especialmente en zonas dominadas por grupos armados ilegales. A esta violencia
se suma una estrategia sistemática de desprestigio y estigmatización desde el
poder político.
Estigmatización desde el poder
A esta violencia se suma una estrategia sistemática de desprestigio y
estigmatización desde el poder político. El informe señala que “funcionarios del
más alto nivel, incluyendo el Presidente de la República, han descalificado
abiertamente a periodistas y medios de comunicación”, calificándolos de
“tendenciosos”, “opositores” o “desinformadores”. Esta narrativa, según la
Relatoría, “podría incrementar los riesgos para quienes ejercen labores
informativas y limitar el pluralismo democrático”.
El informe documenta que “las autoridades habrían calificado a medios y
periodistas como ‘mentirosos’, ‘tendenciosos’ y ‘opositores’”.
En particular, el informe destaca que, durante un acto oficial el 30 de agosto,
el presidente afirmó: “las periodistas del poder, las muñecas de la mafia,
construyeron la tesis del terrorismo en la protesta y la criminalización del
derecho genuino a protestar”.
Para la Relatoría, estos señalamientos pueden “incrementar
los niveles de riesgo de agresiones” contra la prensa y socavan el debate
democrático.
Uso político de medios públicos
Otro motivo de seria preocupación para la CIDH es el uso del sistema de medios
públicos como herramienta de propaganda estatal. El informe indica que RTVC |
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estaría omitiendo contenidos críticos hacia el Gobierno, lo
cual restringe el acceso de la ciudadanía a información diversa e independiente.
También se advierte sobre la concentración de la pauta oficial en medios
públicos y aliados, en detrimento de medios privados.
Asimismo, la Relatoría recogió denuncias por designaciones irregulares en cargos
clave dentro de RTVC, y por posibles casos de acoso laboral, actualmente bajo
investigación de la Procuraduría General.
Frente a este panorama, la Relatoría insta al Estado colombiano a cesar estas
prácticas.
“El Estado debe garantizar que los medios públicos funcionen con independencia,
pluralismo y altos estándares editoriales”, afirma el informe. También exige
“cumplir con los estándares interamericanos de derechos humanos”, asegurando la
protección e independencia de los medios de comunicación, tanto tradicionales
como digitales.
Colombia podría convertirse en una potencia
exportadora de medicamentos
La Asociación Colombiana de la Industria Farmacéutica (ASCIF) destacó la
necesidad de avanzar hacia un sistema regulatorio más ágil y predecible, como
una condición indispensable para que Colombia se convierta en un actor
exportador de medicamentos de calidad internacional.
Actualmente, más de 100 plantas farmacéuticas en Colombia están habilitadas por
el Invima, lo cual es sinónimo de prestigio y capacidad técnica, muchas de ellas
cuentan ya con certificaciones internacionales como Digemid (Perú), Cofepris
(México) o ISP (Chile).
“Como ASCIF proponemos establecer una ventanilla única de exportación para
productos ya registrados, promover la convergencia regulatoria con países de la
Alianza del Pacífico y reforzar la capacitación técnica del personal sanitario y
del sector productivo”. advirtió Clara Isabel Rodríguez Serrano, directora
ejecutiva de Ascif.
Para ASCIF que el INVIMA sea agencia sanitaria de referencia nivel IV de la
Organización Mundial de la Salud (OMS), implica que los procesos, normativas y
decisiones sanitarias del país son de altos estándares confiables para el mundo,
lo que fortalece aún más la reputación de la industria nacional, la mejora en la
integración regional y abre nuevos caminos para la exportación de medicamentos.
“Este reconocimiento permite a la industria acceder a licitaciones
internacionales, evitar re inspecciones y reducir costos operativos. También
contribuye a cerrar la brecha de percepción frente a la calidad del medicamento
nacional: hoy, más del 70 % de los ciudadanos cree que los medicamentos
importados son mejores” manifestó Rodríguez.
Hoy la industria nacional ya exporta a más de 16 países. Sin embargo, para
escalar en innovación es necesario fortalecer la inversión en I+D, flexibilizar
la regulación de ensayos clínicos y promover compras públicas que valoren la
producción nacional.
“Colombia no puede seguir viendo a su industria farmacéutica nacional únicamente
como un proveedor de genéricos. Nuestra industria tiene el potencial de
producir, innovar y exportar. Y estamos listos para trabajar con el Estado, el
Invima, las universidades y nuestros aliados regionales para lograrlo”, culminó
la directora de Ascif.
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